Platos ‘listos para comer’ de Lidl que te sorprenderán (para bien)

Para muchos, recurrir a los platos preparados es uno de los hábitos que ha traído la sociedad actual, con un ritmo de vida que apenas deja tiempo para cocinar. Los supermercados lo saben y por ello cada vez ofrecen una mayor variedad de platos ya elaborados, bien listos para llevar o incluso para tomar directamente en el propio centro. Uno de las últimas cadenas de distribución en apuntarse a la moda del Listo para Comer es Lidl, cuyo espacio de platos preparados calientes o fríos recientes ya ha comenzado a funcionar. Este particular menú se une a la pléyade de opciones de platos preparados de Lidl. ¿Cuáles son los mejores? Os listamos a continuación el ranking de los platos preparados de Lidl que merecen la pena aprovechar por su relación cantidad-calidad-precio.

Lidl se ha asentado como cadena de supermercados de referencia para buena parte de los españoles. Su política de ofertas y promociones que renueva semanalmente lo diferencia de los competidores. Sus productos de marca blanca se afianzan como elección prioritaria para cada vez mayor parte de la tarta del mercado. Calidad, variedad, promoción y buenos precios han catapultado a Lidl al top of mind de una parte importante de los consumidores, también en cuanto a platos preparados, si bien en el área de Listo para Comer se ha quedado algo más rezagado frente a los grandes competidores que llevan años con la experiencia.

1
CROQUETAS DE JAMÓN IBÉRICO

corquetas jamón de Lidl

Unas buenas croquetas caseras parece que siempre apetecen. Y si son de jamón ibérico más aún. Sin embargo, elaborar croquetas en casa lleva tiempo en el proceso y en todos los cachivaches que se necesitan para hacerlas (que, aunque tengas lavavajilla, toca recoger). Lidl lo sabe y desde hace tiempo ofrece en sus lineales croquetas congeladas y frescas listas para freír en casa. Ahora también las podemos comer en el momento cocinándolas en la sala de la oficina o haciéndolas en cinco minutos en casa. Estas croquetas de Lidl no saben tan harinosas como las congeladas y tienen el toque de jamón, sin ser excesiva su presencia, por supuesto, por menos de 2 euros. Merece la pena probarlas, sobre todo cuando te apetece algo caliente pero no tienes mucha hambre.

Atrás