La mejor solución para hacer tu casa accesible – las sillas salvaescaleras

Tener una casa con dos o más plantas es una de las aspiraciones de la mayor parte de las familias en este país: la independencia, el mayor espacio, la posibilidad de disponer de un jardín…

Sin embargo, muchas personas tienen dudas sobre si es la mejor opción pensando en el futuro: ese momento en el que flaquean las fuerzas y ya no se puede estar subiendo día a día las escaleras.

Mucha gente deja pasar la opción de comprar un chalé o una vivienda a dos alturas por el miedo a las escaleras”, explican desde Salvaescaleras y Elevadores Farré: “Sin embargo, hoy en día hay muchas opciones para que una persona con movilidad reducida pueda subir y bajar cómodamente y con una inversión asumible para todo el mundo”.

Estos profesionales se refieren al uso de las sillas salvaescaleras, una opción que cada vez está siendo más utilizada por varios motivos: el abaratamiento de la compra y los costes de instalación, la adaptabilidad de los distintos modelos y la comodidad y seguridad en su uso

Las sillas salvaescaleras: una opción cómoda

Las sillas salvaescaleras permiten subir o bajar entre pisos sin necesidad de hacer un esfuerzo físico. La persona con movilidad reducida tan solo tiene que sentarse en la silla, estabilizar su posición con los cinturones de seguridad y accionar el motor para que la silla suba o baje el piso, de una manera estable y a una velocidad fija y reducida.

El objetivo de estos sistemas es ofrecer al usuario comodidad y seguridad. Por ello, los movimientos del sistema son muy suaves y las personas que están subidas al aparato ni siquiera notan que se están trasladando.

Existen distintos tipos de sillas salvaescaleras, pensadas para adaptarse a las estructuras de los diversos tipos de escaleras. Las más utilizadas son las sillas salvaescaleras para escaleras rectas y las sillas salvaescaleras para escaleras curvas.

Homeglide: salvaescaleras para escaleras rectas

Con una instalación sencilla y rápida, la silla salvaescaleras para tramos rectos de Farré está pensada para escaleras rectas tanto de interior como en el exterior. Es un sistema de elevación sencillo y seguro que por las características de la instalación tiene un precio muy ajustado y adaptado a todos los bolsillos.

Su funcionamiento es suave y silencioso, y tiene una capacidad de carga de hasta 138 kilos, lo que hace que sea muy versátil y pueda ser utilizada por un alto porcentaje de personas.

Flow X: el salvaescaleras ideal para escaleras curvas

¿Y qué pasa cuando la escalera hace curvas y recodos? Farré también dispone de opciones para estos casos. En estos casos debe instalarse algún modelo de salvaescaleras preparados para escaleras curvas como el Flow X, que cuenta con un sistema de giro automático ASL que hace posible el giro de la silla sobre su propio eje durante el trayecto.

El ocupante de la silla no percibe en ningún momento el vaivén o el giro: todo el sistema está pensado para ofrecer el mayor confort al subir escaleras estrechas y empinadas con curvas. Todo ello sin entorpecer el uso de la escalera para las personas que puedan subir y bajar a pie.

Estas son solo dos de las opciones más utilizadas de sillas salvaescaleras. Ambos modelos se adaptan a cualquier circunstancia y tienen precios muy ajustados para que cualquier persona que precise de ayuda al subir y bajar las escaleras pueda beneficiarse de su uso.