Decenas de personas, convocadas por la Coordinadora 25S, que agrupa a diversos colectivos sociales y vecinales de Madrid, ha llevado a cabo este domingo una marcha desde Callao hasta la Puerta del Sol bajo el lema ‘Nos están matando’ para protestar contra la privatización de la Sanidad y la gestión sanitaria contra el Covid-19, pese a la prohibición de esta concentración por parte de la Delegación del Gobierno en Madrid.
Esta marcha ha comenzado a las 12.30 horas desde la plaza de Callao, donde han confluido diferentes grupos con pancartas contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso; en favor de la Sanidad Pública; y contra la sentencia condenatoria al rapero Pablo Hasel.
Así, se han podido escuchar proclamas como «Ilegalizar al Partido Popular», «Gobierne quien gobierne, la Sanidad se defiende», o «Libertad de expresión, delegado dimisión»; y se han mostrado pancartas con lemas como ‘Franco ha vuelto’, ‘Stop recesión’ o ‘Ley Mordaza, dictadura descarada’, además de otra de grandes dimensiones con el mensaje ‘Por una Sanidad y unos servicios 100% públicos. Ayuso dimisión’.
En este momento, y antes de comenzar su recorrido por la calle Preciados hasta Sol, efectivos de la Policía Nacional allí desplegados han comenzado a identificar a algunos los integrantes y organizadores.
Más tarde, los centenares de asistentes han comenzado con su marcha hacia la céntrica plaza de Puerta del Sol, donde han confluido con otros manifestantes y miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, ‘Yayoflautas’, o colectivos de izquierdas.
Por su parte, uno de los integrantes de la Coordinadora 25S Luis Ocampo ha tomado la palabra para afear al delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco, que el sábado permitiese una manifestación «nazi» que conmemoraba a la División Azul durante la Segunda Guerra Mundial, «y sin embargo haya prohibido de forma reiterada una serie de concentraciones en favor de la Sanidad Pública, las libertades, y las condiciones de vida en la Cañada Real.
Así, ante la prohibición de llevar a cabo una concentración, el colectivo ha realizado un paseo, y Ocampo ha explicado que «no quedaba más remedio que coger la alternativa de pasear», ya que estos «de momento no los pueden prohibir».
«El señor Franco es el ariete de la lucha contra las libertades en esta Comunidad. La señora Ayuso, el ‘trifachito’ del Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid son los que van en vanguardia de las privatizaciones y la destrucción de los servicios públicos, pero esto otros le dan cobertura administrativa, política e ideológica por detrás», ha aseverado.
Además, Ocampo ha apuntado que la esperanza de vida en la región ha disminuido en casi dos años en el caso de los hombres y en más de uno en las mujeres durante el año 2020; así como que, por primera vez en años, ha disminuido el número de pensionistas.
«Cuando decimos que nos están matando no es una metáfora. El número de muertes en accidentes de trabajo, a pesar de que ha habido una importante disminución de la actividad industrial y los servicios, ha aumentado significativamente», ha trasladado Ocampo.
Finalmente, ha avanzado que este movimiento «va a continuar con muchísima fuerza y se va a potenciar a pesar del señor Franco, de Ayuso y de todos los que quieren seguir teniendo una vida de privilegios a costa de que el pueblo trabajador y las clases populares cada vez vivan peor». Ha concluido mandando un mensaje de «recuerdo, ánimo y apoyo» a los ciudadanos que han acudido para defender las condiciones de vida en la Cañada Real.
QUERELLA CONTRA FRANCO
El pasado jueves, la Coordinadora 25S aseveró que se había querellado contra José Manuel Franco porque consideraban que «había prevaricado» al no autorizar esta marcha por motivos sanitarios cuando ya había sido planteada a finales de enero, y tampoco autorizada por el mismo motivo.
En este sentido, apuntaban también que el pasado 23 de enero tuvo lugar en Madrid una manifestación de «negacionistas» ante la pandemia del Covid-19 y, por tanto, consideraban que la negativa de la Delegación a autorizar su marcha sólo podía responder a un «uso partidista del cargo».
El colectivo apuntó también sus sospechas sobre la existencia de un «intento planificado» de impedir su posicionamiento público ante la realidad social actual debido a las reiteradas prohibiciones de sus convocatorias.
Aparte de la querella, interpusieron también un recurso contencioso administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM). El departamento que dirige Franco no tenía constancia de la querella, pero sí del recurso, por lo que esperará a lo que resuelva el Alto Tribunal Madrid.
Por su parte, el delegado de Gobierno en Madrid recordó en una entrevista a ‘Canal 33’ el pasado miércoles, que el TSJM confirmó la semana pasada la denegación de la autorización de una marcha contra el Gobierno de España el 6 de febrero en la Plaza de Colón, también prohibida por motivos sanitarios en plena tercera ola de la pandemia de coronavirus por motivos sanitarios.
Así, destacó que en los pocos casos que no se ha permitido una concentración ha sido por el número de manifestantes «excesivo» previstos y avalado por un informe de la Consejería de Sanidad, «teniendo en cuenta el estado epidemiológico».