Esquerra Republicana (ERC) reclamará este martes al Gobierno en el Congreso que se avenga a buscar un acuerdo para poder convocar un nuevo referéndum de autodeterminación en Cataluña y lo hará en plena resaca de las elecciones del domingo, en las que los partidos independentistas sumaron 74 escaños y rozaron el 51% de los votos y en las que los de Oriol Junqueras conquistaron la primera plaza de este bloque superando a Junts en un acta y 35.000 sufragios.
En concreto, ERC llevará al Pleno una moción derivada de la interpelación que el portavoz de los republicanos, Gabriel Rufián, dirigió el pasado 3 de febrero durante la sesión de control al ministro de Política Territorial y primer secretario del PSC, Miquel Iceta. Dado que la semana pasada no hubo pleno con motivo precisamente de la campaña catalana, el texto se someterá a debate este martes y se votará el jueves.
La moción, se discutirá dos días después de los comicios autonómicos que dieron la victoria al PSC en votos, pero que arrojaron un empate a 33 escaños entre los socialistas de Salvador Illa y los independentistas de Junqueras.
Eso sí, los republicanos defenderán su iniciativa sacando pecho por haber logrado su objetivo de imponerse a sus antiguos socios de Junts, que se quedaron con 32 escaños y el (20,06% de los votos), frente al 21,31% cosechado por ERC.
Con estos buenos resultados en su haber, ERC podrá subir a la tribuna de oradores para volver a renovar su apuesta por el diálogo con el Gobierno y tratar de convencerle de que acepte un referéndum de autodeterminación.
En concreto, ERC intentará que el Congreso inste al Ejecutivo de PSOE y Unidas Podemos a «negociar un referéndum de autodeterminación con el Govern de la Generalitat como solución pactada y democrática al conflicto político».
Hace apenas once días, al inicio de la campaña electoral, el Pleno del Congreso ya aprobó otra moción de ERC en la que emplazaba al Gobierno a convocar una segunda reunión de la mesa de diálogo sobre Cataluña tras las elecciones autonómicas. El texto salió adelante con el apoyo del PSOE y Unidas Podemos, mientras que Junts optó por la abstención.
Ahora, ante la petición explícita de negociar una nueva consulta, está por ver qué harán los socialistas y también sus socios de Unidas Podemos, que sí son partidarios de llegar a acuerdos que hagan posible esa convocatoria de referéndum.