El Hospital de Mataró (Barcelona), centro integrado en el Consorcio Sanitario del Maresme (CSdM), ha puesto en marcha un protocolo de suplementación nutricional para los enfermos de Covid-19, a partir del mismo momento en el que son ingresados, que ha permitido reducir a la mitad la pérdida de peso de los pacientes y mejorar su estado nutricional para combatir mejor la enfermedad.
El aprendizaje de la primera ola de la pandemia permitió a los investigadores del CSdM estudiar cómo la enfermedad actúa generando en el paciente un estado de hipercatabolismo, una alteración metabólica que se produce cuando una persona se encuentra en un estado crítico produciéndose un mayor gasto energético y la destrucción de musculatura esquelética.
La pérdida de peso está explicada por este hipercatabolismo y también por los vómitos y diarreas asociados a la enfermedad, por la dificultad de comer por la insuficiencia respiratoria y la aplicación de oxígeno y por la disfagia. De hecho, la Covid-19 genera muchos casos de malnutrición severa.
En la primera ola, el equipo investigador de motilidad digestiva del CSdM, dirigido por el doctor Pere Clavé y del que forman parte las nutricionistas Paula Viñas y Claudia Alarcón, desarrolló un estudio de investigación junto a Nutricia, el área de nutrición especializada de Danone Specialized Nutrition, con el objetivo de analizar la aparición de la desnutrición y disfagia en pacientes Covid-19. En esta investigación clínica se analizó a 205 pacientes y se detectó un 45,5 por ciento de malnutrición alta. También se observó una pérdida de peso significativa, principalmente en pacientes malnutridos.
En la segunda ola, aplicando ya un protocolo de suplementación nutricional precoz y una dieta hospitalaria hipercalórica-hiperproteica a 401 pacientes, se ha comprobado que la malnutrición en el momento del alta se ha reducido al 32,7 por ciento y el descenso de peso también ha sido sensiblemente menor ya que la pérdida media de 6 kilogramos en todo el proceso de la enfermedad (desde que inician los síntomas en casa hasta que el paciente recibe el alta) que se observó en la primera parte de la pandemia se ha situado en torno a los tres kilogramos.
El Hospital de Mataró no sólo ha abordado este proceso en el período en el que el paciente está ingresado sino también en el periodo posterior. Así, desde la primera ola se diseñó una dieta de recuperación post-Covid que se entregaba con el alta médica.
Resultado de esta intervención, se ha observado que la mayoría de pacientes recuperaban el peso perdido y la malnutrición en un plazo de 3 a 6 meses después de sufrir la enfermedad. Respecto a la disfagia, en la primera ola fue de un 44,8 por ciento (35,3% de los cuales eran nuevos casos).
Al dar de alta a los pacientes en la segunda ola, el porcentaje baja a un 27,6 por ciento. A juicio de los investigadores, este dato refleja, probablemente, el hecho de que el paciente de esta segunda ola tiene menos edad y, por tanto, se ve menos afectado, a pesar de que también se investigan otros aspectos.