Podemos da al juez pruebas para acreditar que gente de Neurona trabajó en la campaña de 2019

Podemos ha entregado este lunes al juez que investiga la presunta financiación ilegal del partido en el caso ‘Neurona’ diverso material, incluidos billetes de avión, los lugares donde se alojaron y vídeos, para intentar acreditar que el personal de la consultora política trabajó en la campaña para las elecciones generales del 28 de abril de 2019.

La formación ‘morada’ ha enviado al Juzgado de Instrucción Número 42 de Madrid un listado de 21 personas a las que identifica como «integrantes del equipo de Neurona que vinieron a desarrollar presencialmente trabajos para la campaña electoral del año 2019».

En concreto, ha aportado sus datos personales –nombre, apellidos y pasaporte– y sus fechas de llegada y salida a España, precisando las funciones que habrían desempeñado en la campaña electoral.

Podemos ha acompañado este listado de justificantes de billetes de avión, de los lugares donde se hospedaron y de vídeos y fotografías que mostrarían a estas personas trabajando tanto en el local de la calle Maudes de Madrid donde se ubicó el equipo de campaña como en los actos electorales.

«IMPULSO» A LA INVESTIGACIÓN

Además, la organización política ha entregado al juez Juan José Escalonilla un listado de diez personas que formaban parte de los equipos de trabajo de Podemos que, según afirma, cubrieron la campaña electoral en coordinación con el personal de Neurona, para que les cite a declarar como testigos.

«Todas estas personas pueden ofrecer el testimonio directo de la experiencia del trabajo llevado a cabo por Neurona junto con el equipo de campaña de Podemos, así como la modalidad en la que se ejecutaban los trabajos, con quienes compartían espacio y trabajo y cómo se distribuían las correspondientes tareas», ha indicado.

El partido de Pablo Iglesias ha explicado que de esta forma pretende «dar un decidido impulso al esclarecimiento de los hechos». El juez trata de dilucidar si Neurona hizo realmente el trabajo para el que fue contratada por Podemos por 363.000 euros para la campaña electoral de 2019 o si, como sospecha, fue un contrato simulado para desviar dinero de las cuentas ‘moradas’.