PP y Cs buscan en Madrid que la oposición condene los disturbios de Sol

El Gobierno municipal del Ayuntamiento de Madrid buscará mañana apoyos en Cibeles, a través de una moción de urgencia, para que los grupos de la oposición (Más Madrid, PSOE y Vox) condenen los disturbios de la Puerta del Sol del miércoles pasado acaecidos durante la manifestación a favor del rapero Pablo Hasel así como que expresen su confianza en la democracia española.

Así, en la moción, se busca que el Pleno manifieste «su absoluta y firme condena de los disturbios causados por los violentos en la tarde noche del 17 de febrero en el centro de la ciudad, así como de cualquier manifestación que los secunde o trate de justificar».

Se trasladan también «sinceros deseos de recuperación para todos los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que resultaron heridos durante los incidentes» así como la «confianza absoluta en el Estado de Derecho y en la calidad democrática del país».

Recuerdan que el «derecho de reunión pacífica y sin armas» y el derecho «a expresar y difundir libremente los pensamientos, ideas y opiniones mediante la palabra, el escrito o cualquier otro medio de reproducción, no son absolutos en el sentido de la doctrina constitucional», es decir, «están sujetos en el primer caso a la necesidad de «comunicación previa a la autoridad» y en el segundo caso al «respeto a los derechos reconocidos».

Aseguran que los incidentes de Sol «desbordaron el derecho de reunión y la legítima expresión de la opinión y/o de la discrepancia para convertirse en un atentado contra el orden, la convivencia y la seguridad ciudadana».

Además, en el texto indican que «resultaron heridos más de una decena de agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, de acuerdo a la información oficial», puesto que «los participantes en los incidentes atacaron a los agentes con adoquines arrancados del suelo, palos, botellas piedras y otros enseres».

«Destrozaron mobiliario urbano y escaparates, incendiaron cubos de basura y papeleras provocando daños por valor de miles de euros que aún están por cuantificar en su totalidad. La actuación de estos incontrolados puso en jaque el centro de la ciudad y causó peligro para los bienes y las personas durante casi tres horas, alterando gravemente la convivencia», concluye.