La Oficina Regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Europa ha aplaudido la «resiliente» cobertura sanitaria en España, calificándola de «ejemplo a seguir para el resto de Europa».
«Al adoptar medidas para establecer una política de cobertura resistente, que garantice que las personas no pierdan la cobertura sanitaria cuando su nivel de vida o su salud disminuyan y que les dé derecho a una mayor protección cuando se encuentren en situaciones vulnerables, España constituye un ejemplo a seguir para el resto de Europa», ha resaltado el organismo sanitario internacional de Naciones Unidas.
En concreto, la OMS celebra las nuevas exenciones de los copagos para las recetas ambulatorias, una reforma que se espera que beneficie a unos 6 millones de personas. A partir del 1 de enero de este año, los pensionistas con rentas bajas, los niños con discapacidades moderadas y graves y los hogares que reciben prestaciones por hijos ya no tienen que pagar de su bolsillo los medicamentos recetados.
De la misma forma, aplauden que el Gobierno haya destinado 49 millones de euros a la ampliación de la cobertura de la atención dental. «Ambos cambios pretenden reducir las desigualdades en el acceso y reforzar la protección financiera, en línea con las recomendaciones de la OMS sobre cómo los países pueden avanzar hacia la cobertura sanitaria universal», señalan.
Según la OMS, estas reformas se centran «en las principales deficiencias de la cobertura sanitaria». «En el Sistema Nacional de Salud español, casi todos los servicios cubiertos son gratuitos. Los medicamentos para pacientes externos son una excepción clave. Los niños y los adultos deben pagar copagos de hasta unos 4 euros por cada medicamento recetado para la mayoría de las enfermedades crónicas y, para el resto de los medicamentos recetados, copagos que oscilan entre el 10 y el 60 por ciento del precio (según los ingresos del hogar y la situación de la pensión). Los mecanismos de protección de las personas han sido limitados, especialmente para las personas de bajos ingresos en edad de trabajar», explican.
De la misma forma, indican que, aunque no hay copagos para los servicios odontológicos, la gama de servicios odontológicos en el paquete de prestaciones financiadas con fondos públicos es «muy reducida: principalmente servicios preventivos para niños y mujeres embarazadas, extracciones e intervenciones de urgencia».
«Esto significa que casi todos los cuidados dentales se pagan de su bolsillo, lo que provoca dificultades económicas en algunos hogares y hace que otros renuncien a los cuidados dentales. La proporción de la población que declara una necesidad insatisfecha de atención dental debido al coste, la distancia o el tiempo de espera es mayor en España que la media de la Unión Europea, y está marcada por una importante desigualdad de ingresos», denuncia la OMS.
«LA HERENCIA DE LA AUSTERIDAD»
El organismo recuerda que España se vio «muy afectada» por la crisis financiera y económica que comenzó en 2008. En este sentido, critican que los cambios políticos en la cobertura sanitaria introducidos en 2012, en el contexto del Mecanismo Europeo de Estabilidad, «crearon barreras de acceso para muchas personas».
«La vinculación del derecho a la asistencia sanitaria financiada con fondos públicos al pago de las cotizaciones a la seguridad social, por ejemplo, restringió el acceso de los inmigrantes indocumentados y de las personas que trabajan en la economía informal. La introducción de copagos para las recetas ambulatorias para los pensionistas, y el aumento de estos copagos para los niños y los adultos empleados, también aumentaron la presión financiera sobre ciertos grupos», enumeran.
Para la OMS, las reformas de 2012, bajo el Gobierno del PP de Mariano Rajoy, «aumentaron las barreras de acceso, especialmente para las personas en situación de vulnerabilidad». De hecho, recuerdan que, según el último Barómetro Sanitario, una encuesta anual sobre la percepción de los ciudadanos del sistema sanitario español, el 3 por ciento de la población declaró no poder acceder a los medicamentos prescritos por motivos económicos.
APLAUDEN LA RECUPERACIÓN DE LA UNIVERSALIDAD
La OMS destaca que finalmente en 2018 se recuperó la universalidad del sistema sanitario español, otorgando «el derecho a la protección de la salud y a la asistencia sanitaria, en las mismas condiciones, a todas las personas que se encuentren en España». «España también está tratando de eliminar las barreras administrativas de acceso a las que todavía se enfrentan los inmigrantes indocumentados y otros grupos de personas desfavorecidas», resaltan.
«En conjunto, estos cambios no solo pretenden volver a la situación anterior a 2012, sino que probablemente hagan avanzar a España varios pasos en el camino hacia la cobertura sanitaria universal», loa la OMS, que reivindica que este tipo de medidas de protección son «especialmente importantes en el contexto de la COVID-19».
Por último, la OMS ha anunciado que la Oficina de Barcelona de la OMS para la Financiación de los Sistemas de Salud está trabajando con un equipo de expertos españoles para evaluar en qué medida las personas que viven en España experimentan dificultades financieras cuando utilizan los servicios de salud, incluidos los medicamentos. En el marco del Programa de Trabajo Europeo, que tiene la cobertura sanitaria universal como una de sus tres prioridades, este nuevo análisis ayudará a identificar los servicios sanitarios con más probabilidades de provocar dificultades económicas, las personas más afectadas y las causas fundamentales de las deficiencias en la cobertura.