El presidente del PP de Barcelona, Òscar Ramírez, ha exigido este lunes al Ayuntamiento de Barcelona que se persone por intento de homicidio y delito de atentado, contra los activistas que prendieron fuego a una furgoneta de la Guardia Urbana en La Rambla con un agente en su interior –que tuvo tiempo de salir– en las protestas del fin de semana contra la detención del rapero Pablo Hasél.
En rueda de prensa telemática, también ha pedido que se personen como acusación particular contra Arran –la organización juvenil de la izquierda independentista vinculada a la CUP–, después de que hayan reivindicado diversos ataques y llamen, a través de las redes sociales, «a nuevas jornadas de violencia».
Para Ramírez, las diferentes administraciones deben ejercer como acusación particular contra «los violentos para reclamar las responsabilidades penales, civiles y patrimoniales» a sus autores.
Por ello, ha reiterado la petición del PP de urgir al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, a convocar una junta de seguridad de Cataluña para frenar el «terrorismo callejero» sufrido durante las dos últimas semanas tras el encarcelamiento del rapero Pablo Hasél.
Además, ve necesario que se convoque una junta local de seguridad porque «es inadmisible la inacción del Gobierno, de la Generalitat y del Ayuntamiento de Ada Colau tras días de violencia en las calles.
«Los manifestantes no son jóvenes disgustados, son chusma violenta organizada con ganas de destruir la ciudad. Mientras algunos políticos cuestionan las pistolas foam, nadie denuncia las piedras, adoquines e incluso los cócteles molotov que usan los violentos contra la policía, los hoteles y los comercios», ha remarcado.
Así, se han adherido a la campaña del partido para apoyar a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, a las policías locales y a los Mossos d’Esquadra y ha explicado que saldrán a la calle a recoger firmas en su favor.
Según Ramírez, la CUP no debería formar parte de la Mesa ni presidir el Parlament porque sus condiciones para formar parte del Ejecutivo catalán son «un insulto para los ciudadanos y los agentes de seguridad».
También se ha referido a la decisión de la Fiscalía Superior de Cataluña de querellarse contra el actual presidente del Parlament, Roger Torrent, y otros tres miembros de la cámara catalana por presunta desobediencia al Tribunal Constitucional (TC) «por haber permitido la tramitación de una serie de mociones vinculadas al proceso independentista».
El presidente del PP de Barcelona ha mostrado «máximo respeto» por la actuación de la justicia, dejando claro que respetarán y acatarán lo que digan los jueces.
APOYO A ROLDÁN Y PARERA
Después de que el PP catalán lograra sólo 3 diputados en el Parlament, Ramírez considera lógico que surjan críticas en el seno del partido ante «un mal resultado electoral».
También cree que Lorena Roldán y Eva Parera –número dos y tres de la lista–demostrarán que son «grandes parlamentarias y activos para el proyecto» del partido.
