El abogado del expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont ha señalado este martes, tras conocerse que el pleno del Parlamento Europeo ha dado luz verde al suplicatorio remitido por el Tribunal Supremo (TS) por el que se suspenderá la inmunidad parlamentaria del expresidente, que recurrirán ante el Tribunal General de la Unión Europea y que además preparan otras acciones dentro de su estrategia de defensa.
Iremos «al Tribunal General de la Unión Europea, que es a quien corresponden las demandas de anulación por las decisiones del Parlamento Europeo, pero vamos a hacer otras muchas cosas más», ha dicho en declaraciones a TVE, para luego matizar que ahora toca leer la resolución y terminar de escribir escritos que preparan para actuar, aunque no ha querido avanzar nada dado que «cada cual tiene que jugar sus cartas de la mejor manera posible».
Esta primera reacción de la defensa del expresident llegaba minutos después de que se conociera que los eurodiputados también han aprobado levantar la inmunidad de los otros dos representantes de JxCAT, los exconsellers Toni Comín y Clara Ponsatí, a los que también reclama el Supremo. El pleno considera que los hechos imputados son anteriores a que los tres políticos independentistas ocuparan su escaño y no guardan relación alguna con su actividad en la Eurocámara.
A pesar de este revés, el abogado, Gonzalo Boye, ha señalado que no espera «en absoluto» que tras esto la justicia belga responda positivamente a la extradición dado que «es un tema zanjado». «Entiendo que esta es una decisión política que puede dar un juego político, (..) pero me llama atención que casi mitad del parlamento europeo se ha opuesto al suplicatorio», ha añadido, para subrayar que es un número muy significativo el que «no le ha dado la razón a España de manera rotunda».
A esto, ha añadido que jurídicamente están «tranquilos y preparados» porque en el asunto ya «hay un jaque mate» y lo único que falta es conocer en cuantas jugadas se termina la partida.
Por otro lado, preguntado por dónde ha de vivir a partir de ahora el expresidente, reside en Waterloo a 20 kilómetros de Bruselas en un barrio residencial, ha apuntado que de momento seguirá en su domicilio y que una vez se resuelva el suplicatorio «habrá que tomar decisiones». «Pero ahora hay una situación de facto que debe abordar y con eso él vive», ha añadido.
En cuanto a la decisión del juez instructor de la causa del ‘procès’ Pablo Llarena, que planteó a las partes la posibilidad de presentar una cuestión prejudicial al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) para que determine el alcance de las euroórdenes emitidas contra el ex president de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont y los ex consellers Clara Ponsatí, Antoni Comín y Lluis Puig, después de que los jueces belgas se negaran a entregar a este último, Boye ha explicado que llevaban dos años esperando ese paso de Llarena.
Pero ha advertido que eso que Llarena eleva a consulta –y que ya ha tenido una respuesta positiva por parte de la Fiscalía del Supremo– es algo que ya está resuelto por lo que no esperan «nada distinto» a lo que vienen sosteniendo. «La decisión de la Cámara de Apelaciones de Bélgica del día 7 de enero se basa en jurisprudencia de TJUE, entiendo la posición del juez Llarena, la respeto, es una contienda jurídica pero la tiene perdida, sin duda», ha apostillado.
Por lo demás, Boye ha incidido que ahora toca ver en qué términos va a conceder el suplicatorio el parlamento europeo, pero avanza que están «bastante tranquilos» y que son conscientes de que Llarena pidió suplicatorio «para solo un tipo de actuación, no para todo y por lo tanto parlamento nunca va a poder acordar algo mas allá de lo que solicitó el juez».
«El presidente Puigdemont podrá ir a Estrasburgo y volver, e iremos viendo los espacios de libertad que se vayan gestionando a partir de los recursos que se vayan interponiendo», ha concluido.