Borràs se compromete a defender la soberanía del Parlamento de Cataluña

La nueva presidenta del Parlament, Laura Borràs, se ha comprometido este viernes a defender la soberanía de la Cámara ante «cualquier injerencia exterior» tras asegurar que es la máxima expresión de la voluntad del pueblo catalán.

«Haré que esta soberanía sea respetada y defendida ante cualquier intento de injerencia exterior. He aceptado someterme a esta votación en plena conciencia de alta dignidad que implica, pero sobre todo de la responsabilidad que supone presidir una Cámara que está, es y seguirá siendo uno de los principales objetivos de la guerra sucia y antidemocrática del Estado contra Cataluña», ha sostenido en su primer discurso en el pleno de constitución del Parlament.

Según Borràs, el Parlament es la máxima expresión «de la tozuda expresión de voluntad de ser de un pueblo que no se quiere ver sometido por nadie, ni necesita ni acepta tutelas de ningún tipo para decidir cómo debe regir su destino colectivo», y ha remarcado que la palabra debe ser libre en la Cámara catalana.

En su primer discurso –durante el que los diputados de Cs han abandonado el pleno–, ha asegurado que su deber es mantener la inviolabilidad del Parlament y su independencia del poder judicial y ejecutivo, y que su objetivo es preservar los derechos de los diputados, que ha garantizado que no serán recortados: «Mientras sea presidenta de esta Cámara, eso no pasará».

«Les invito a no poner límites a la democracia y a hacer posible que la libertad de Cataluña llegue donde los ciudadanos quieran decidir», ha añadido Borràs, que ha subrayado que la ley debe adaptarse a la voluntad popular en democracia, y que una cámara legislativa debe poder legislar sobre lo que la mayoría de los diputados decida.

Ha recordado a los políticos encarcelados por el 1-O y a los que residen en el extranjero, incluido el exjefe del Ejecutivo catalán Carles Puigdemont –el presidente legítimo, según ella–, y la expresidenta del Parlament en prisión, Carme Forcadell, cuyo papel al frente de la Cámara ha dicho admirar: «Mi objetivo es continuar el trabajo donde lo dejó, porque ningún tribunal y ninguna cárcel nos hará renunciar a nuestras ideas«.

SIN MENCIÓN A TORRENT

«Lo que el Estado español no consigue ganar en las urnas lo intenta ganar en los tribunales. La judicialización de la política es la demostración más grande de impotencia política», y el Estado no sólo no quiere dialogar, sino que quiere limitar el diálogo en el Parlament, ha dicho Borràs, que ha citado a Forcadell pero no ha hecho mención alguna a su predecesor en el cargo, el republicano Roger Torrent.

Ha insistido en que el Parlament se debe mantener firme en la defensa de los valores democráticos y debe «tener coraje para plantar cara a la represión», y ha proclamado que esta XIII legislatura debe marcar un punto de inflexión y de avance hacia la independencia de Cataluña, como cree que pidieron los ciudadanos en las elecciones del 14 de febrero.

Borràs, que ha defendido el uso del catalán, y también de la lengua de signos catalana y el aranés, se ha marcado como objetivo trabajar para que el Parlament sea abierto, «transparente, austero e íntegro», y también para modernizarlo, para avanzar hacia una Cámara puntera, digital y avanzada.

CONTRA LA EXTREMA DERECHA

La también dirigente de Junts ha advertido de que «lo que no tiene cabida en democracia y en el Parlament son la xenofobia, el racismo, el machismo y cualquier tipo de opresión personal o nacional», y ha avisado de que será implacable si se dan casos en la Cámara, en la que Vox tiene representación por primera vez.

«Nos tenemos que conjurar para no dar eco a las ideas totalitarias que se afanan en extenderse peligrosamente por nuestra sociedad», y ha pedido evitar normalizar el fascismo, en un Parlament que por primera vez tendrá sólo a mujeres en la Presidencia y las vicepresidencias –Anna Caula (ERC) y Eva Granados (PSC)– y 65 diputadas de 135 escaños.

QUERÍA PRESIDIR EL GOVERN

Borràs, que ha cerrado su primer discurso invitando a cantar ‘Els Segadors’, lo ha abierto con un minuto de silencio por las víctimas de la pandemia de Covid-19 y por quienes trabajan para superar la situación, y ha avisado de que «la garantía del progreso económico y social de una sociedad es directamente proporcional a su capacidad legislativa».

«Para paliar los efectos devastadores que la crisis sanitaria ha tenido en todos los ámbitos será crucial no sólo la orientación del Govern, sino también el impulso legislativo» que se realice en el Parlament, ha remarcado su nueva presidenta.

Borràs, que ha empezado su discurso emocionada, ha admitido que su objetivo al presentarse a las elecciones catalanas era presidir la Generalitat y no el Parlament, y ha dicho que entrar en el Govern podría haber sido una opción más confortable: «Pero no abandoné la vida académica ni la dedicación a las letras buscando el confort».