La candidata de Junts, Laura Borràs, ha sido la que ha recibido más apoyos en la primera votación para elegir al presidente del Parlament de la XIII legislatura, pero no ha sumado los votos suficientes para ser escogida en esta primera vuelta, en la que se requiere mayoría absoluta.
Borràs ha obtenido 65 votos –de Junts y ERC, y otro de la CUP, que ha cedido un voto a Junts por Lluís Puig (Junts), a quien no se le ha permitido delegar el voto, al estar en Bélgica–, seguida por la socialista Eva Granados, que ha reunido 42 –33 del PSC, seis de Cs y tres del PP–.
Les han seguido Joan Carles Gallego (comuns), con el apoyo de los ocho diputados de su grupo, y María García Fuster (Vox), con los 11 del suyo, mientras que ocho diputados de la CUP han votado en blanco.
Los cupaires ya habían expresado sus recelos a apoyar la candidatura de Borràs, que tiene una causa judicial abierta por su gestión del Institut de les Lletres Catalanes, pero habían asegurado que, con su voto, garantizarían la Presidencia de la Cámara para el independentismo.
Tras esta primera votación, los diputados volverán a depositar su apuesta en la urna del pleno en una segunda vuelta, en la que será escogido el candidato que obtenga más votos de los dos que han recibido más apoyos en la primera: Borràs y Granados.
La elección de Borràs como presidenta de la Cámara está asegurada con los votos de Junts y ERC, después de que hayan alcanzado un acuerdo a menos de 24 horas para la celebración de este pleno tras varias semanas de negociación y por el que Junts se queda con la Presidencia del Parlament, ERC con una Vicepresidencia y la CUP una de las cuatro Secretarías de la Mesa.
El pleno se celebra por primera vez en el Auditori del Parlament en lugar de en el hemiciclo para mantener las distancias y las medidas de seguridad por la pandemia del coronavirus.