El Gobierno ha asegurado que el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero no ejerce «ningún papel particular» en la política exterior tras conocerse que mantuvo un encuentro con la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, en febrero de 2020 antes de viajar a Venezuela, al tiempo que ha insistido en que sus actuaciones son siempre a título personal.
Así ha respondido el Ejecutivo a varias preguntas parlamentarias formuladas por distintos grupos de la oposición en relación con dicho encuentro, cuya existencia no se conoció hasta hace unas semanas, así como a los viajes realizados por el expresidente a Venezuela y su buena relación con el régimen de Nicolás Maduro.
Sobre el encuentro en cuestión, que tuvo lugar el 4 de febrero de 2020, Exteriores ha explicado en respuesta a una pregunta de Ciudadanos que González Laya se reunió con el expresidente «para intercambiar puntos de vista sobre diversas cuestiones de política internacional».
La reunión se tradujo «en una conversación distendida, a solas, sin agenda prefijada y sin que exista minuta alguna de los distintos temas tratados relativos a la situación internacional», ha precisado el Gobierno en su respuesta, aclarando que solo estuvieron presentes la ministra y Zapatero y que al ser considerado un «encuentro privado» no se consideró necesario hacerlo público.
Por otra parte, respecto a la pregunta formulada por el PP sobre «qué papel juega el expresidente Zapatero en la política exterior del actual Gobierno», Exteriores ha recalcado que este «no desempeña ningún papel particular en la definición» de la misma.
«La ministra habla, escucha e intercambia pareceres con centenares de personas a lo largo del año sobre cuestiones internacionales, sin que ello atribuya a sus interlocutores ningún papel singular en la política y la acción exterior», ha argumentado su departamento en la respuesta.
Así las cosas, y en otra respuesta parlamentaria al PP, el Gobierno ha recalcado que «las posiciones y actuaciones del presidente Rodríguez Zapatero se inscriben en el ámbito de lo personal y no representan la política del Gobierno, que es definida por el presidente del Gobierno y por la ministra de Asuntos Exteriores».
Además, en otra respuesta, ha evitado pronunciarse sobre el papel de Zapatero respecto a Venezuela, amparándose que «el Gobierno no hace valoraciones de las actuaciones privadas de anteriores presidentes».
Preguntado por el PP sobre la postura de la ministra ante la petición del expresidente socialista de retirar las sanciones al régimen de Maduro, el Gobierno ha reiterado que las posiciones expresadas por este «representan su opinión personal y no representan la política del Gobierno».
En cuanto a las sanciones, ha recordado que la UE ha dictado sanciones respecto a Venezuela contra «55 personas por violaciones graves de los Derechos Humanos o por actuaciones que socavan los fundamentos del Estado de Derecho», si bien ha subrayado que «tanto la UE como España son contrarias a la adopción de sanciones de carácter general que puedan impactar negativamente en las ya muy deterioradas condiciones de vida de la población venezolana».
Por otra parte, el Gobierno también ha respondido a preguntas de los ‘populares’ respecto al llamado Grupo de Puebla, del que forman parte entre otros Zapatero, el expresidente boliviano Evo Morales o la expresidenta brasileña Dilma Rousseff.
En este sentido, Exteriores ha sostenido que desde su creación en 2019 «ha servido de foro de encuentro de un grupo progresista latinoamericano» y por tanto, como tal, «las iniciativas, declaraciones o tomas de posición» del mismo «no definen la política exterior de España» y no le corresponde al Gobierno «manifestarse acerca de las actuaciones o reflexiones del referido grupo o sus miembros».