Los mejores remedios para los mosquitos del mercado

Es una batalla que lleva no miles, sino millones de años librándose en nuestro planeta. Picaron a los terribles dinosaurios, incomodaron a los grandes mamuts lanudos y hoy nos hacen la vida imposible a nosotros: los mosquitos son auténticos expertos combatientes, pero por suerte, no son invencibles. Mantener alejados a estos insistentes insectos puede parecer difícil, pero con el antimosquitos adecuado es posible volver a dejar las ventanas abiertas para dormir sin miedo.

¿Por qué pican los mosquitos?

En realidad, no todos los mosquitos pican: solo las hembras lo hacen. Y no las de todas las especies, aunque sí buena parte de ellas. Las hembras de mosquito necesitan un aporte de proteínas para poder realizar sus puestas de huevos, motivo por el que han desarrollado la habilidad de alimentarse de la sangre de otros animales.

¿Y cómo encuentran a sus presas? Por el CO2 que emitimos al respirar, concretamente al espirar. Dado que dejar de respirar desde el atardecer al alba, que es cuando estos voraces insectos están más activos, no es una opción muy sana, nos vemos obligados a explorar otras vías de defensa.

Qué antimosquitos usar

Cuando se trata de cubrir habitaciones de interior o, especialmente, grandes espacios de exterior, las lámparas antimosquitos son un excelente remedio contra esta plaga y también nuestro aliado más moderno.

Se trata de lámparas que emiten una luz ultravioleta especialmente atractiva para mosquitos y otros insectos, con lo que estos no pueden evitar acercarse directamente a ellas. Cuando lo hacen, la lámpara emite una pequeña descarga eléctrica que mata al instante al insecto, recogiendo sus restos en una bandeja inferior.

Suena muy espectacular, pero en realidad todo ocurre sin que nos demos cuenta de ello y, aunque hay lámparas de muy distintas potencias y alcances de protección, casi todas ellas tienen un consumo eléctrico bastante reducido.

Las lámparas antimosquitos son particularmente útiles en entornos más rurales descubiertos, donde la concentración de mosquitos puede ser realmente grande, aunque también se utilizan a menudo para proteger la habitación en que se duerme, si es que la luz no resulta molesta al usuario. Eso sí, es importante no usarlas en entornos donde haya abejas en cantidad, ya que también se sienten atraídas por ellas y protegerlas es muy importante.

Si lo que buscamos es únicamente mantener a los mosquitos alejados y no necesariamente matarlos, la opción más ecológica y natural es optar por las plantas antimosquitos. Estas plantas aromáticas producen naturalmente un olor que, aunque agradable para nosotros, resulta un excelente repelente para mosquitos y otros insectos.

Así, una planta de lavanda, de citronela o de albahaca, por mencionar solo algunas de las muchas existentes, nos permitirá disfrutar del ocio en el exterior o de unas noches tranquilas y sin molestos zumbidos.

Además, cuentan con la ventaja de que las plantas aromáticas son habitualmente especies de gran rusticidad, lo que significa que son muy resistentes y fáciles de cultivar y mantener, no siendo necesario en absoluto ser un experto en jardinería. Además, son plantas muy bonitas que darán vida a cualquier habitación, balcón o jardín.