Llega la Semana Santa y es tiempo de recogimiento, vacaciones y…torrijas. Y es que si hay algo típico de estas fechas (además de las procesiones y la película Ben Hur), es comer torrijas. El problema es que muchas veces no disponemos de todo el tiempo que deseamos para hacerlas, por eso apostamos por comprarlas. Seguro que has visto las torrijas congeladas del Mercadona, y la pregunta es, ¿merecen la pena?
Pues nosotros hemos hecho esa prueba. Nos hemos acercado al supermercado, las hemos frito según dicen las instrucciones y tenemos nuestra valoración. Ahora bien, hay que analizar más puntos antes de dar nuestra opinión de chef. Es el momento de ponerlos el mandil y encender los fogones, o no…
1Los postres de Semana Santa
La Semana Santa es una de las fechas más emotivas del calendario. Es el momento de descansar pero también de disfrutar de las cosas buenas de la vida. Y estas son los postres. Y es que esta época se caracteriza por los diferentes postres que se pueden hacer, aunque por encima de todos destaca las torrijas.
Una receta que es muy antigua, incluso se mencionan en libros de recetas que datan de finales del siglo XVI o principios del siglo XVII como, por ejemplo, el libro Arte de cozina allá por el 1611. Así que fíjate si es una receta antigua. En mi caso siempre las recuerdo porque era el plato favorito de mi abuela cuando llegaban estos días.