El director teatral Joan Ollé ha negado las acusaciones de presunto abuso y acoso a alumnos por las que fue apartado de la docencia en el Institut del Teatre, pero ha pedido perdón si su «manera de enseñar y de comunicar ha podido hacer daño, de manera no intencionada».
En un comunicado remitido a ‘El Periódico’ que el diario recoge este miércoles, ha defendido su inocencia y se ha disculpado tanto con quienes le han denunciado como con quienes no: «Tengo la absoluta convicción de que nunca he cometido ningún comportamiento legalmente reprobable hacia ellos«.
«Hasta ahora, nadie me ha hecho saber que se haya sentido molesto, ofendido o maltratado por mis actos o palabras», ha dicho Ollé sobre un caso que empezó cuando el diario ‘Ara’ publicó un reportaje en que una veintena de testimonios alertaban de supuestos maltratos psicológicos y vejaciones durante 30 años en el centro.
Ollé ha explicado que ha «confraternizado con los alumnos fuera de las horas de clase», pero ha defendido que nunca ha pretendido obtener ninguna ventaja de su posición docente.
«Otra cosa es que a algunos no les gustase mi carácter ni compartiesen mi sentido del humor. Pero esto no es ningún delito, ni una agresión a nadie», ha afirmado.
También niega haber mantenido «ningún tipo de relación sentimental ni sexual con ninguna alumna ni alumno en ningún caso bajo ninguna circunstancia».
«Nunca he utilizado mi posición académica para acosar a nadie ni para sacar partido de ninguna otra manera. A pesar de que mis alumnos han sido siempre mayores de edad y con capacidad de consentimiento, para mí esta ha sido una línea roja que nunca he pisado», ha afirmado.
Se ha abierto a «discutir, valorar, dar la razón y si hace falta volver» a disculparse con aquellos que consideren que algunos aspectos de su personalidad pedagógica, en sus palabras, no son los más adecuados para su sensibilidad, y se sintieron heridos.
También pide que no se le «condene antes de ser juzgado«, avisa de denuncias por difamación y añade que ha esperado a pronunciarse sobre el caso hasta ser citado a declarar el pasado viernes 26 de marzo en la Comissió per la Prevenció de l’Assetjament Sexual en la sede de la Diputació de Barcelona, según ha explicado ‘El Periódico’.
