Un golpe de mar es la posible causa del naufragio el pasado marte de una embarcación deportiva, con un padre y un hijo que realizaban pesca recreativa, en las inmediaciones de la Insua da Area, en el municipio de Viveiro (Lugo). El progenitor –P.G.F., de 66 años– falleció.
Así figura en el atestado policial, en el que los dos agentes fuera de servicio, que se encontraban en la zona y ayudaron en el rescate, relatan lo sucedido el martes.
De este modo, dos policías nacionales destinados en Bilbao, se encontraba con permiso autorizado en residencia familiar en la zona de Area, en Viveiro, cuando escucharon gritos de socorro sobre las 12,10 horas del 30 de marzo. Tras dar aviso al 112, bajaron por un acantilado hasta el nivel del mar, en donde avistaron a uno de los dos ocupantes de la embarcación ‘La Condia’, I.G.G., que se encontraba en una zona rocosa.
Los dos agentes ayudaron a la víctima a llegar a tierra firme. Así, I.G.G., que presentaba síntomas de hipotermia y de estar en shock, les informó de que estaba pescando con su padre cuando «una ola les volcó el barco», lo que provocó que cayesen al mar, al tiempo que la embarcación se estrellaba contra las rocas.
Tras ello, la víctima estuvo «una media hora pidiendo auxilio» dentro del agua mientras agarraba a su padre para que no se lo llevase la corriente. Sin embargo, finalmente, «tuvo que soltarle porque no tenía más fuerzas y veía que se iban a ahogar los dos», señala el atestado.
Posteriormente, el padre fue localizado por el helicóptero Pesca 2, rescatado y evacuado al hospital de Burela, aunque falleció.
Por su parte, el Pesca 2 hizo un segundo viaje para llevar también a I.G.G. al hospital de Burela, que sufría un cuadro de hipotermia y agotamiento físico. Mientras, fue necesario una tercera intervención del helicóptero para trasladar a los dos agentes a la base del puerto de Celeiro debido a encontrarse en una zona acantilada.