Podemos ha denunciado públicamente el intento de incendiar su sede en Cartagena por parte de «los cachorros de Vox» y ha lamentado que «mientras los matones de la ultraderecha siembran la violencia», el presidente del Gobierno regional, Fernando López Miras, «premia a sus amigos con sueldos y consejerías», asegura la formación morada en un comunicado.
La sede de Podemos en Cartagena «ha sufrido un nuevo ataque por parte de la ultraderecha», según la formación morada, que recuerda que «no es la primera vez que se da esta circunstancia en el local morado de la ciudad portuaria». En mayo «ya rompieron varios cristales con piedras y en septiembre el local fue objeto de pintadas amenazantes con simbología neonazi», según Podemos.
Esta vez, tal y como ha denunciado el coordinador autonómico de Podemos, Javier Sánchez Serna, «han ido más allá, intentando incluso incendiar la sede con cócteles molotov, algo que podría haber causado una auténtica desgracia humana y no solo daños materiales».
Podemos Cartagena ya ha cursado este mismo viernes por la mañana una denuncia ante la Policía Nacional, a quien ha aportado todas las imágenes que las cámaras de seguridad han captado del momento del ataque.
Además, Unidas Podemos ha anunciado que presentará en la Asamblea Regional y en todos los ayuntamientos donde tiene presencia declaraciones institucionales y mociones de condena «a la violencia que la ultraderecha lleva a cabo en la Región de Murcia».
Sánchez Serna ha asegurado que desde su formación no tienen «ninguna duda de quién está detrás» y apunta a «los cachorros de Vox». Para el coordinador de Podemos en la Región de Murcia, «es obvio que es la ultraderecha quien azuza con su odio estos ataques y la que prende la mecha de la violencia».
Además, lamenta que el ataque a la sede de Podemos se da «el mismo fin de semana que los diputados ultra entran en el gobierno regional. Desde Podemos señalan que mientras «los matones de la ultraderecha siembran la violencia, López Miras premia a sus amigos con sueldos y consejerías», lo que supone «una vergüenza y el mayor ataque en décadas a nuestra democracia».
Por su parte, la portavoz de Podemos en Cartagena, Leli García, ha recordado que se trata del tercer ataque en menos de un año que sufre el local del partido en Cartagena. Critica, además, que desde la Asamblea Regional «aún no se ha condenado esta violencia, a pesar de que desde Podemos han presentado en cada ocasión una propuesta de declaración institucional contra la misma».
En septiembre, Podemos recuerda que el diputado de Vox Salvador Pascual vetó una declaración en este sentido, mientras que en mayo «PP, Ciudadanos y Vox rechazaron condenar otro ataque». A su juicio, «si en la Región de Murcia los violentos están envalentonados es porque sienten la complicidad de las altas esferas y se creen impunes».
Los responsables de Podemos advierten que no van a quedarse «con los brazos cruzados ni dejarse intimidar», sino que estos ataques «solo reafirman la necesidad de seguir trabajando». Sánchez Serna ha apostado por «construir la solidaridad y la fraternidad desde los pueblos y desde los barrios», y ha recordado que desde esa sede se ha estado ayudando «a cientos de personas con los trámites del Ingreso Mínimo Vital, de manera desinteresada y por parte de voluntarios y voluntarias del círculo de Cartagena».
En su opinión, eso es precisamente «lo que le duele a la ultraderecha y lo que quieren impedir; nosotras creemos y trabajamos por otro modelo de sociedad basado en el respeto y la igualdad y no en el odio y la exclusión que ellos intentan sembrar», ha concluido Sánchez Serna.