Elena Álvarez Brasero se une al club de los chaqueteros naranjas que piden asilo en el PP

La diputada de Ciudadanos Elena Álvarez Brasero se ha unido al club de los chaqueteros cofundado por el exconsejero de Transportes Ángel Garrido y su director de Márketing de Metro, Miguel Oliver y motivado por el actor y exdirigente de Ciudadanos Toni Cantó. La parlamentaria autonómica no tuvo hace meses ningún tipo de reparo en poner a caer de un burro al PP. Pero ahora, mientras ha visto que su formación se hundía en la miseria más absoluta, Álvarez Brasero asegura sentir los colores de Pablo Casado y se ha pasado al PP exaltando los valores de su nuevo partido. Es tal el trasvase de chaqueteros de Ciudadanos al PP que ya no sorprende demasiado en el partido azul, pero el caso de Álvarez Brasero es especialmente curioso dados los comentarios que dejó por escrito la parlamentaria. Sobre si tiene equipo de fútbol, no lo tenemos claro.

El estilo de Álvarez Brasero es similar al momento en el que Torrente se encuentra con los aficionados ultras del Real Madrid en el aeropuerto. «Por eso yo nunca me he sentido ni me podré sentir identificada con el PP. Aparte de la corrupción, claro», decía una contundente Elena en 2020. Y ahora directamente ha dicho lo contrario sin despeinarse y con más de una bandera de España. Es un orgullo para mí unirme al proyecto del PP de Madrid y encima de la mano de una de las mejores parlamentarias de nuestro país. El 4 de mayo nos jugamos mucho en Madrid y debemos estar todos unidos para defender la #libertad», ha asegurado Álvarez Brasero este jueves ante la estupefacción de los suyos.

Hay algunos, como Miguel Oliver, director de Márketing y comunicación de Metro de Madrid, que directamente se han escondido debajo de la mesa a la espera de que Isabel Díaz Ayuso no se dé cuenta de que sigue ahí, chupando del bote de lo público mientras lee algún diario deportivo, siempre que no deje a un lado su labor de márketing que ha consistido en hitos históricos como poner la bandera de España en el rombo de la boca de Metro de Plaza de España. Pero hay otros, como Elena Álvarez Brasero, que no disimulan. Si hay dinero, ahí que va. Y si amenazan con quitárselo, es la primera que se adelanta a los mayores y a los niños para subirse al bote salvavidas.

Esto va del mejor postor y no siempre las cosas salen como uno espera

También detalla en su cuenta de Twitter que es una «europeísta convencida», pero fuentes de su entorno no aseguran que también sea una ferviente defensora de oriente próximo o de la China meridional. Esto va del mejor postor y no siempre las cosas salen como uno espera, sino que se lo digan a la parlamentaria de Ciudadanos que ha tenido que tragarse su orgullo para pedir asilo político en el Partido Popular lo antes posible.

El caso de Elena Álvarez Brasero ha indignado poco a los dirigentes del Partido Popular. «¿Quién es esa?», se preguntan las fuentes del PP que han sido consultadas por MONCLOA.com. «¿Elena Álvarez qué?», insisten. Su plana trayectoria al frente de la formación naranja le ha valido como una capa camaleónica para ir con el rabo entre las piernas al PP, esa formación con la que nunca «podría sentirse identificada». Nadia siquiera se había dado cuenta de que Elena Álvarez Brasero se había ido a Ciudadanos, igual que de no ser por su incoherencia política nadie se habría enterado de que ha vuelto al PP.

El caso de Álvarez Brasero no es el único. Todos los cargos de Ciudadanos que saben que se quedarán sin trabajo ya están tirando de contactos en el PP para quedarse chupando de lo público. Algunos lo han conseguido, como Toni Cantó, que se ha trasladado desde Valencia solo para seguir con su cargo de diputado y no ponerse de nuevo a madrugar para rodar series de televisión de segunda línea. Otros, como Oliver, se esconden debajo de la mesa y otros, como Brasero, se tragan sus palabras con tal de tener un sueldo de partido y seguir optando a cargos de diputada o lo que sea que le reporte algún que otro beneficio.

Álvarez Brasero ha irritado a los pocos que la conocen, pero entienden que es una forma que tiene el PP en base a una estrategia urdida desde arriba de arrebatar a Ciudadanos la poca estructura política que le queda. Sin embargo, Álvarez Brasero no es precisamente un golpe de efecto que traerá votos, única crítica que hacen desde el PP al fichaje de esta irrelevante diputada que no se le recuerda ninguna actuación, discurso o réplica relevante desde que se dedica a la vida política.

MONCLOA.com se ha puesto en contacto con la diputada y ella ha asegurado, primero, que sí que tiene varios «discursos relevantes» y tan solo se ha afiliado al partido. No especifica las razones por las que ha pasado de Ciudadanos al PP a pesar de sus palabras.