Aragonès urge a abrir una nueva etapa en Cataluña

El vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, ha reivindicado que para abrir una nueva etapa de transformación y libertad en Cataluña hay que hacerlo con «todos los proyectos sobre la mesa y los presos políticos en libertad», así como respetar el mandato del 1-O igual que el del 14 de abril de la Segunda República.

En el acto de conmemoración del 90 aniversario de la proclamación de la Segunda República que se ha celebrado este miércoles en la Escola Cases de Barcelona, ha manifestado su voluntad de «abrir una nueva etapa con los valores republicanos desde las instituciones».

«Hoy en el país hay esperanzas de que sea modernizado, transformado y de avanzar hacia el progreso social y la libertad nacional. Hay días que duran años, días de alegría, de compromisos políticos y de grandes transformaciones, que también han tenido momentos duros y de dolor», ha añadido.

Aragonès ha destacado que la Segunda República demostró que la «libertad nacional y el progreso social tienen que ir de la mano», y ha apostado por continuar actualmente ese legado que, a su juicio, dejó el republicanismo.

«El republicanismo en nuestro país no nació aquel 14 de abril, nació antes. Y los valores republicanos e ideas republicanas no murieron el 1 de abril de 1939, sino que han continuado y siguen vigentes y más plenos que nunca. El 14 de abril es un día que dura años, que aún dura», ha zanjado.

ESTER CAPELLA

La consellera de Justicia, Ester Capella, ha reivindicado el deber de actuar de acuerdo con el sentimiento y anhelos de los ciudadanos, y ha asegurado que desde el Govern están comprometidos con los valores de la Segunda República ante la «represión» que, a su juicio, sigue existiendo.

«Los avances republicanos fueron truncados por el totalitarismo. Hoy queda mucho trabajo por hacer. Trabajo que es el antídoto contra cualquier amenaza totalitaria. 90 años después de la proclamación de la república, aún hay represión hasta el punto del exilio y cárcel», ha incidido.

Capella ha querido subrayar «el paso adelante» que supuso la Segunda República en la lucha por la igualdad efectiva entre mujeres y hombres, con el derecho a voto, al divorcio o el reconocimiento de derechos de las mujeres más allá del ámbito doméstico.