Pepe Rodríguez es uno de los chefs más apreciados de la televisión por su carácter entrañable y natural, una impresión que se consolida cada vez que Pepe es protagonista de alguna de las emisiones de MasterChef. Tras una larga carrera entre fogones, llegó a la televisión de pura casualidad y en un momento muy crítico de su vida, algo por lo que el cocinero está sumamente agradecido, y eso es algo que sabe transmitir en sus intervenciones. A sus 52 años, ha conseguido convertirse en uno de los personajes televisivos que más simpatía despierta en la audiencia, y a pesar del enorme éxito adquirido gracias al talent-show, Pepe sigue siendo el de siempre, simpático, humilde y trabajador. La fama, no le ha cambiado y eso es algo que gusta.
UNA EDICIÓN DE ‘MASTERCHEF’ CON RÉCORDS DE AUDIENCIA
MasterChef se encuentra ahora mismo emitiendo su octava edición de anónimos, y a punto de finalizar con una nueva y flamante victoria. Una edición que se ha convertido en la más vista de la historia del programa, a pesar de ser un formato que no resulta novedoso para el público. ¿El motivo? Las múltiples polémicas protagonizadas por sus concursantes, han atraído la atención de la audiencia como nunca antes, convirtiéndose en verdaderos personajes de reality. La dirección del programa siempre se ha caracterizado por unos castings en los que se daba más importancia a la capacidad de generar polémica que al verdadero interés por la cocina, y esto siempre ha sido muy criticado, aunque a nivel de espectadores ha demostrado muy buenos resultados. Y en esta edición han dado absolutamente en el clavo con los aspirantes elegidos.
