Errejón gira al centro para intentar que Más Madrid sea la sorpresa del 4M

Jornadas laborales de cuatro días que facilitan la conciliación, una apuesta inequívoca de las administraciones por el Medioambiente y un guiño muy aplaudido hacia la Salud Mental. Estos son los tres ejemplos en los que se ha convertido el ‘errejonismo’, que intenta salir de su ostracismo político tras la derrota de Carmena en las municipales y del propio Errejón en las autonómicas y estatales de 2019. 

Más Madrid/Más País quiere emerger como una herramienta de política útil después de que Errejón haya cambiado el doctrinario latinoamericano por el europeísmo de formaciones verdes que triunfan, por ejemplo, en Alemania. 

Y parecía no tenerlo fácil de cara al 4M ante la resurreción de Ángel Gabilondo y la irrupción de Pablo Iglesias. Pero lo cierto es que pasan los días y Más Madrid está obteniendo unas estupendas expectativas de la mano de Mónica García, anestesista y exdeportista con un conocido bagaje por su oposición contra las políticas de Isabel Díaz Ayuso.

La buena imagen de García se está agudizando con un busacdo regionalismo que contrasta con las campañas de corte estatal del PSOE y Unidas Podemos (con Pedro Sánchez sosteniendo a Ángel Gabilondo y Pablo Iglesias intentando rescatar a los morados).

MÁS MADRID BUSCA APARECER COMO LA IZQUIERDA ÚTIL

El giro conservador del PSOE de Ángel Gabilondo, que promete no subir impuestos y vetar a Pablo Iglesias en un hipotético gobierno progresista, y el giro izquierdista de Unidas Podemos, que está basando su campaña en agudizar su perfil obrerista (y antisistema con la guerra mediática de Iglesias), podría dejar a Más Madrid un carril libre en una izquierda que va desde la socialdemocracia hasta lo que representó hace una década Izquierda Unida.

Cierto es que  la casi impecable campaña de Mónica García, que arrancó con mal pie al insinuar pacto con Pablo Iglesias para acabar denunciado el presunto machismo de su posible aliado solo 24 horas después, se ha visto alterada.

Y lo ha hecho por su aparición en ‘Buenismo bien’ de la Cadena SER. En este programa, cuyos presentadores son cercanos a Unidas Podemos (Manuel Burque y Quique Peinado), García abandonó su moderación habitual para cargar contra el vídeo electoral de Ayuso: «Es el ‘running’ de alguien que no ha hecho ‘running’, yo le hubiera recomendado una bicicleta que es más fácil de usar».

Y finalmente acabó ‘perreando’, hecho que ha despertado algunas críticas provenientes desde una derecha mediática que parecía enfocada en criticar a Gabilondo e Iglesias. 

MÓNICA GARCÍA CONTRA AYUSO

Mónica García asegura sobre los planes impositivos del PP que Ayuso «no entiende que estamos en una crisis sanitaria, social y económica y que la bajada de impuestos que ellos prometen es pinchar el flotador de la salida de la Comunidad de estas crisis». 

Sobre la presidenta autonómica en funciones, añade: «Isabel Díaz Ayuso ha seguido el perfecto manual trumpista, el perfecto manual populista y el perfecto manual de quien utilizan las instituciones para hacer campaña propia. No lo ha dejado de hacer en ningún momento y es seguramente la política con más propaganda y menos política de hechos reales».

«Sabemos que eso funciona, tenemos el ejemplo de Trump: esa política de la confrontación, de polarización, del bulo, de la mentira y del sálvese quien pueda, tiene sus receptores. Ella lo tenía claro desde el primer momento de la pandemia y basó absolutamente toda su estrategia en hacer ese tipo de política», añade.

La errejonista asegura que la prioridad de Más Madrid es «resolver la situación en la que estamos, que es la pandemia, porque no la tenemos resuelta ni la hemos tenido resuelta nunca. La siguiente urgencia es recomponer y reconstruir todo aquello que nos servía de colchón, que nos servía de red. Esa red la han adelgazado hasta el punto de que ante cualquier eventualidad podemos caernos todos. Hay que recomponer los servicios públicos y la manera de hacer política y de concebir lo que es un gobierno en una comunidad».