Las películas postapocalípticas están de moda, más aún en los tiempos que corren. Netflix lo sabe y no para de incluir o estrenar títulos de este subgénero de la ciencia-ficción, aunque muchas no podrían estar en esta clasificación. Uno de los títulos que está arrasando en la plataforma de streaming es la película ‘De amor y monstruos’, la aventura protagonizada por Dylan O’Brien; tanto, que ya se habla o desea una segunda parte.
Vamos a conocer algo más sobre esta película de acción y veremos como no sólo es descabellado pensar en una segunda parte, sino que el propio final abierto de la película la hace ideal para ello. No sabemos si pensaron en ello a la hora de ese final o simplemente decidieron concluir así el film y dejar a la imaginación del espectador.
De qué va ‘De amor y monstruos’
en ‘De amor y monstruos’ Joel Dawson, el protagonista, es uno de los últimos supervivientes tras un desastre planetario que convirtió a reptiles y e insectos en monstruos enormes y depredadores mortales. Han pasado siete años desde el apocalipsis global y Joel descubre que su ex novia Aimee (Jessica Henwick) vive muy cerca de él, a tan sólo unos kilómetros. Ante ello, decide abandonar la seguridad de su búnker e ir en su busca.
Obviamente le espera un trayecto lleno de peligros, pero por el camino recibe la ayuda de dos supervivientes veteranos pero que no son humanos: un perro llamado Boy un robot dañado. Una premisa de lo más emocionante y también romántica que sin duda trae acción, emoción y un lado humano fuerte con el que identificarnos con el protagonista.
