El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha acordado el archivo provisional de la investigación abierta por los negocios inmobiliarios de Oleguer Pujol, el hijo menor del expresidente catalán Jordi Pujol, al que fuera su socio Luis Iglesias Rodríguez-Viña por el presunto delito de blanqueo de capitales.
El juez del Juzgado Central de Instrucción número 5 ha dictado un auto con fecha de este lunes, en el que explica que no ha resultado debidamente justificado la participación del Iglesias –yerno del expresidente de la Comunidad Valenciana y exministro de Trabajo Eduardo Zaplana– en los hechos que se imputa a Oleguer Pujol.
«No resulta debidamente justificada la perpetración del delito de blanqueo, sin que existan expectativas de obtener nuevos datos inculpatorios», afirma el juez Pedraz.
La investigación de estos hechos se iniciaron precisamente en el Juzgado Central número 1, que aún dirige Santiago Pedraz, por una denuncia de la Fiscalía Anticorrupción en 2014 y que se inhibió a favor del Juzgado Central número 5, que ha investigado la fortuna de la familia Pujol, al comprobarse que el origen de parte de las cantidades invertidas por Oleguer Pujol provenían «de un lugar común a sus hermanos».
Se da la circunstancia de que por la marcha del titular del Juzgado Central número 5, José de la Mata, a Eurojust, el juez Pedraz fue designado encargado de los asuntos de este juzgado, que ahora compagina con los que tenía en el Juzgado Central número 1, al que aún no ha llegado su sustituto.
PIEZA SEPARADA ABIERTA TRAS EL PROCESAMIENTO
Precisamente el juez De la Mata propuso juzgar a toda la familia Pujol en julio de 2020 –procesamiento que ha confirmado la Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional este martes– e incoó la pieza separada ‘Drago’ para seguir indagando en el origen del dinero que invirtió Oleguer Pujol en diversas operaciones inmobiliarias de la empresa Drago Capital y en la propia compañía.
Asimismo, el magistrado quería investigar el «destino de algunas de estas inversiones». Por ello, mantuvo imputado al hijo pequeño de Jordi Pujol y Marta Ferrusola junto a otras siete personas, entre ellas Luis Iglesias.
El juez Pedraz, encargado de continuar con esta instrucción, comparte en su resolución la conclusión alcanzada por la Fiscalía Anticorrupción sobre que las «evidencias afloradas» respecto al yerno de Zaplana, como es la utilización de sociedades extranjeras para el cobro de comisiones, «resultarían insuficientes para alcanzar la convicción de reproche penal de delito de blanqueo a título de dolo».
«NO EXISTIRÍAN INDICIOS CLAROS E INEQUÍVOCOS»
«No existirían indicios claros e inequívocos de que conociera que el capital invertido por Oleguer Pujol procediera de una previa actividad delictiva», asegura la Fiscalía en su informe.
Los fiscales Anticorrupción José Grinda y Juan José Rosa remitieron el pasado 9 de abril este escrito solicitando el sobreseimiento de la pieza separada ‘Drago’ con respecto a Luis Iglesias. En él relatan la presunta participación de los investigados en el denominado ‘proyecto Brick’, consistente en la compraventa de 1.152 locales de sucursales bancarias del Banco Santander, que se llevó a cabo por Samos Servicios y Gestiones SLU.
Así, afirman que «las actuaciones que hemos analizado podrían quedar incardinada en el delito de blanqueo de capitales, pues la operativa de Oleguer Pujol, aquí analizada, ha contribuido al aprovechamiento y ocultación del producto de hechos constitutivos de delito».
No obstante, consideran que no hay pruebas suficientes para demostrar que Iglesias tuviera conocimiento del origne del capital invertido por el principal investigado.
Además señalan que tampoco se ha acreditado que Luis Iglesias «participara en la canalización de fondos o comisiones que paga Sun Capital Partners a través de la sociedad Marway BV» a favor de José María Villalonga Cardella y José María Villalonga Cabarrocas o los hijos del financiero Javier de la Rosa, Javier y Gabriela, todos ellos también investigados.