Las residencias gallegas se erigen como prueba de la efectividad de las vacunas

Transcurridos casi cuatro meses desde que el 27 de diciembre de 2020 Nieves Cabo inaugurase en la residencia Porta do Camiño de Santiago el proceso de vacunación en Galicia, las residencias cumplen un mes sin contagios ni muertes por covid y se erigen ahora como prueba de la efectividad de las vacunas en la lucha contra la pandemia tras representar la peor cara de la misma.

El pasado 21 de marzo, las autoridades sanitarias notificaron un brote con once usuarios contagiados en una residencia de Silleda (Pontevedra). Fueron, hasta la fecha, los últimos casos de covid-19 de residentes en los centros de mayores de Galicia, que tampoco registran fallecidos en el último mes.

Desde el 1 de abril, cuando estas once personas dieron negativo en las pruebas diagnósticas, los geriátricos gallegos permanecen sin casos activos de coronavirus entre los mayores. Si tenemos en cuenta los positivos entre los trabajadores, estos centros llevan ya nueve días consecutivos libres del patógeno.

LAS MUERTES, APENAS EL 6% DEL TOTAL EN MARZO

Además, las muertes en estos centros han pasado de representar casi la mitad de las que dejaba la pandemia mensualmente a apenas el 6% de las que registradas en el marzo.

Todo ello gracias al proceso de vacunación, que arrancó a finales de diciembre entre los mayores en las residencias, primer grupo prioritario en el plan diseñado por la Administración central. Por aquel entonces, los geriátricos gallegos sumaban 114 casos activos y casi el 42% de los fallecimientos por covid en la comunidad.

118 días después de aquel histórico 27 de diciembre, el 93% de los usuarios de residencias de mayores están vacunados con las dos pautas completas. El 7% que no lo está corresponde, según la Consellería de Política Social, a nuevas incorporaciones en los centros que en su día «renunciaron» a recibir la vacuna.

La Xunta resalta el papel «determinante» jugado por la vacuna para frenar la incidencia del covid en los centros de mayores y como muestra de ello señala una fecha de la que se cumplió un mes el pasado viernes: el 23 de marzo.

Esa fue la última jornada en la que hubo que lamentar un fallecido relacionado con un centro residencial, una mujer de 92 años usuaria de la residencia de Silleda, precisamente la última en registrar contagios hasta el momento.

Sin embargo, el 20 del mismo mes, tres días antes de la muerte de esta nonagenaria, fallecía en el Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) otro usuario del mismo geriátrico silledense. Era un hombre de 87 años que ya contaba con patologías previas y que contrajo el coronavirus a pesar de que estaba vacunado con ambas dosis.

Se trata del único caso conocido en Galicia de un residente que perdió la vida aunque ya había sido completamente inmunizado. En todo caso, la Consellería de Política Social insiste en que es «un caso aislado» y recuerda que las vacunas «no tienen un 100% de efectividad».