El PP contiene la euforia: “satisfacción muy contenida”

A pocos minutos de la apertura de las urnas, miembros del PP de Madrid confiesan que las sensaciones son muy buenas. Preguntados por si hay euforia, la respuesta es: “satisfacción muy contenida”, con ganas de que empiece la apertura de las urnas. 

El equipo de Isabel Díaz Ayuso y también los principales dirigentes del PP a nivel nacional se han mostrado confiados en lograr un muy buen resultado, a tenor de las muestras de cariño recibidas durante toda la jornada electoral. 

Analizando los once puntos de mayor participación a las 18h, los expertos demoscópicos de la formación de centro-derecha, tienen claro que, si se supera el 70% de participación, podrían estar ante una victoria de las que hacía años que no se vivían en la región, recordando las épocas de Esperanza Aguirre, cuando gobernó a base de mayorías absolutas. 

En concreto, en la séptima planta, los dirigentes del PP de ámbito nacional. El equipo de Isabel Díaz Ayuso está en la primera planta. La actual presidenta de la Comunidad de Madrid tiene previsto entrar en la sede nacional del partido en torno a las 20h para vivir el recuento. 

En la calle Génova se ha vuelto a instalar el equipo de megafonía con los escenarios que auguran buenos momentos y noche larga de celebración. En torno a las 20,30h se espera que comparezca para comunicar las sensaciones de los dirigentes de la formación uno de los dirigentes de la campaña electoral de Isabel Díaz Ayuso. 

Afectará a la política nacional

Por mucho que en Moncloa insistan en rechazar la lectura en clave nacional de estos comicios, lo cierto es que, con la presión ejercida por parte de Pedro Sánchez, sus ministros e incluso Tezanos, el presidente del CIS, los resultados afectan al ámbito español porque, con un Pp de Madrid superando el 40% de votos, y Ciudadanos fuera de la Asamblea Regional, Pablo Casado podría acercarse al 30% de intención de voto para el PP y, por tanto, aspirar a superar en escaños al PSOE, un hecho que provocaría, de entrada, un mayor nerviosismo en las filas socialistas, ya que la influencia de Ciudadanos sería menor y también la de Unidas Podemos.

Los responsables de campaña del PP han decidido no dar por vendida la piel del oso, ya que las encuestas eran muy variables y, con llegar al 5% de votos, Ciudadanos puede ser clave con sus 6-8 diputados. Es por ello que aquí nadie quiere dar por terminada la carrera de la formación naranja y tampoco se aventuran a analizar las posibilidades de pactos postelectorales, “es demasiado pronto para ello”, pero tienen claro que durante toda la campaña, las órdenes eran de “no atacar en demasía a Edmundo Val”, no tanto por los apoyos con los que han estado gobernando y siguen haciéndolo en lugares como Castilla y León, sino por si al final hay que sentarse a negociar y volver a un gobierno que, en este caso, dejaría a la formación naranja como apoyo adicional y sería Vox quien pudiera asumir mayores responsabilidades de gobierno en la Puerta del Sol.