El coordinador del grupo de trabajo Covid Persistente de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), Lorenzo Armenteros, ha señalado que se ha conseguido describir hasta 201 síntomas de la COVID-19 persistente.
En un debate ‘on line’ organizado por la Fundación Ramón Areces junto con la Cátedra Solutex de la Universidad de Zaragoza para analizar el ‘Síndrome Post Covid, una enfermedad inflamatoria no resuelta’, el experto ha reconocido que hay pacientes con el también llamado ‘Long Covid’ desde hace más de un año.
Armenteros ha definido esta patología como aquella que sufren «pacientes con antecedentes de afectación generalmente leve o moderada en la fase aguda de la COVID-19, pero que pasadas cuatro e incluso 12 semanas, siguen presentando sintomatología muy variada, frecuentemente fluctuante e incapacitante, que no se explica por una enfermedad subyacente alternativa».
Entre esos más de 200 síntomas relacionados con esta nueva patología, ha mencionado como los de mayor incidencia el cansancio generalizado, que afecta al 95 por ciento de los pacientes; el malestar general, también presente en el 95 por ciento de los casos; los dolores de cabeza (86%); alteraciones en estado de ánimo (86%); dolores musculares (82%); la falta de aire o disnea (78%); dolores articulares (79%); y falta de concentración o niebla mental en el 78 por ciento de los casos. «Hay otros muchos síntomas descritos con alta incidencia y que impiden a estos pacientes llevar una vida normal», ha añadido Armenteros.
Por otra parte, el doctor José Ramón Paño, investigador principal del Grupo de Investigación Clínica en Enfermedades Infecciosas del Instituto de Investigaciones Sanitarias Aragón, ha explicado que «esta pandemia está siendo una guerra sanitaria». «Ha habido demasiados ensayos clínicos autorizados de forma independiente y que en realidad estaban intentando resolver la misma pregunta. Esto ha llevado a que hubiera muchos trabajos con escaso poder estadístico para extraer conclusiones», ha destacado.
Sobre la actitud de la población hacia la enfermedad, José Ramón Paño ha considerado que la mayoría de la ciudadanía ha entendido la gravedad de la situación y las medidas que era necesario adoptar para evitar su propagación. «Consideraría ejemplar a la mayor parte de la población, pero también ha habido un porcentaje de personas que no ha asimilado la información que se ha ido suministrando», ha añadido.