PNV y EH Bildu ven «una buena noticia» la investidura de Aragonès

PNV y EH Bildu han considerado una «una buena noticia» la investidura de Pere Aragonès como nuevo presidente de Cataluña, mientras que el PSE ha considerado que puede volver la «crispación». Por su parte, Elkarrekin Podemos ha confiado en que se encauce «un proceso de diálogo entre la Generalitat y el Gobierno de España» y PP+CS ha denunciado los «mensajes permanentes de ruptura».

En una tertulia en Radio Euskadi, los parlamentarios vascos se han referido al hecho de que el Parlament de Cataluña haya investido este viernes al candidato de ERC y hasta ahora vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, como presidente de la Generalitat, con 74 votos de los republicanos, Junts y la CUP, y 61 votos en contra del PSC-Units, Vox, los comuns, Cs y el PP.

Desde el PNV, la parlamentaria Leixuri Arrizabalaga ha afirmado que la investidura de Aragonès supone una «buena noticia» por que era necesario crear gobierno para «encauzar la situación política», pese a que se encontrarán con muchas dificultades.

«El lehendakari y el PNV lo han felicitado y le han ofrecido su mano tendida en lo que se pueda ayudar», ha valorado, al tiempo que ha destacado que el nuevo presidente catalán se haya comprometido a trabajar «no única y exclusivamente en el derecho a decidir y la amnistía de los condenados».

Por su parte, el parlamentario de EH Bildu Mikel Otero ha felicitado a ERC por el hito que supone «tener un presidente republicano después de tanto tiempo», así como al independentismo catalán «en general que, diferencias aparte, han sabido llegar a buen puerto».

Así, ha valorado el compromiso de «mantener la agenda soberanista, independentista encima de la mesa y consensuar una estrategia que permita desbloquear el conflicto político con el Estado buscando un referéndum».

Por último, ha subrayado «el giro social al que se han comprometido Aragonès, a través del impulso que les ha dado las CUP, con medidas concretas como el impulso a una banca pública o una renta básica».

PSE-EE

Desde el PSE, el portavoz parlamentario, Eneko Andueza, ha advertido que cuando en la balanza se tengan que poner cuestiones soberanistas o políticas que afectan a la ciudadanía, «lamentablemente caerá del lado del soberanismo».

Además, ha sostenido que es «una pena que la lista más votada, la del PSC, no haya tenido posibilidad de gobernar», ya que «ahí sí se habría abierto un tiempo de esperanza para Cataluña y los acuerdos entre diferentes hubieran sido más factibles».

«Probablemente volverá la crispación y ruptura social de la mano de los soberanistas. Espero que la sociedad no vuelva a vivir capítulos unilaterales», ha confiado.

Desde Elkarrekin Podemos-IU, Iñigo Martínez ha considerado que «ya era hora que se conformara un Ejecutivo ya que Cataluña necesita un «gobierno estable», aunque ha reconocido que no tiene «muchas esperanzas puestas» en que lo sea.

Asimismo, ha asegurado que en el Parlamento catalán se da una mayoría independentista en escaños, pero también existe una mayoría progresista y de izquierdas a la que «ERC y las CUP han renunciando en favor de una agenda nacional».

«Esperemos se encauce un proceso de diálogo entre la Generalitat y el Gobierno de España. La solución debe pasar por el diálogo, la democracia y por que los presos del ‘procés’ estén en la calle», ha argumentado.

PP+CS

Por último, el portavoz parlamentario de PP+Cs, Carmelo Barrio, ha considerado que Cataluña representa el «ejemplo a evitar en política» y ha criticado que «los nacionalistas se dejan engatusar por un escenario» que confía «nunca pase en Euskadi».

«Es un gobierno con debilidad, dividido, con mensajes permanentes de ruptura. Se va a seguir con la división social y la ruptura», ha vaticinado, para añadir que el nuevo Ejecutivo representa «una fábrica de tensión entre los catalanes y con el Estado».