Ayuso destaca la «fortaleza» de Madrid: «No hemos escondido nunca la cabeza»

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha destacado la «fortaleza» de Madrid y ha reivindicado que nada nunca ha sido «ajeno» a la región y en ella no han escondido «nunca la cabeza», ni han mirado «para otro lado». «Aquí se viene a vivir en paz, sí. Pero también a estar donde pasa lo importante», ha remarcado.

En su discurso en el acto de toma de posesión que se ha celebrado este sábado en la Real Casa de Correos, sede del Gobierno regional, ha hecho hincapié en que en estos tiempos recios, «que como nunca antes han convertido al mundo en un gran patio donde todo se comenta», ha brillado especialmente «la forma de ser» de los madrileños, «de vivir».

«Algo que no nos hemos inventado ahora, sino que ha estado siempre ahí, nos lo hemos dado entre todos a lo largo de cinco siglos de capitalidad. Lo que ha hecho mi gobierno es respetarlo y protegerlo», ha defendido la dirigente regional.

Así, ha subrayado que a Madrid «se viene a ser empresario, estudiante, vasco o catalán y manifestarlo allá donde se desee». «Porque en Madrid todos encuentran su sitio para desarrollar sus proyectos y cumplir sus aspiraciones sin que nadie lo cuestione. Aquí se escucha a todo el mundo que tenga algo valioso que contar», ha ensalzado la presidenta autonómica.

Ayuso ha defendido que se han convertido «en la segunda casa de todos: para los que buscaban una nueva oportunidad, convivir con los más creativos, o la libertad perdida». En este punto, ha subrayado que los madrileños nunca han tenido «miedo a la libertad» sino que, al contrario, solo han temido perderla, y por ella han luchado y lucharán siempre.

«A veces se nos olvida que se nos hizo la capital de un mundo, el de España e Hispanoamérica, del que somos herederos. Aquí se unen todas las formas del español y de lo hispano. Por eso uno de mis objetivos es hacer de la Comunidad de Madrid la capital del español en Europa«, ha remarcado.

Así, ha trasladado que no se pude olvidar «que Madrid, castizo o vanguardista, solemne o jaranero, siempre ha estado cuando se le ha necesitado» y no les ha fallado «al resto de españoles». Ayuso ha resaltado que a lo largo de la historia «en Madrid han brillado los grandes músicos, escritores, pintores, guerreros y religiosos».

En este punto, ha incidido en que con la pandemia, con Filomena, las inundaciones o los incendios, ha pasado como en otras grandes calamidades o cuando la invasión francesa, ya que «los que han brillado han sido los hombres y mujeres corrientes: los profesionales, los que hacían su oficio por modesto que fuera: los sanitarios, los bomberos, trabajadores de supermercados, del transporte, los profesores… todos juntos».

HEROÍSMO DE LOS MADRILEÑOS ANÓNIMOS

«En los momentos más difíciles que ha vivido la Comunidad de Madrid en décadas, hemos demostrado que éramos mejores personas, y que nuestra actitud ante la vida tenía más sentido que nunca. Y esta fortaleza, que ha sorprendido al mundo, no la hemos inventado nosotros, es el carácter de los españoles que, juntos en Madrid, hacemos cosas maravillosas», ha indicado.

Además, ha puesto en valor «el heroísmo de tantos madrileños anónimos, la solidaridad, el cumplimiento del deber de todo tipo de profesionales, la lucha por sobrevivir en un hospital, batallando con la enfermedad, o intentado mantener un proyecto de vida, un negocio o el empleo». Para la dirigente regional, todo esto no ha hecho perder la alegría ni las ganas de seguir adelante, sino todo lo contrario.

«Lo veo en las calles. Calles en las que recibo un cariño que me hacen sentir agradecida y abrumada. Solo espero estar a la altura del entusiasmo que me encuentro cada día. ¿Qué más se puede pedir como político, como madrileña y española?», ha dicho.

En este punto, ha asegurado que la gente de Madrid la «ha enseñado a ser un poco más empresaria, hostelera, estudiante, sanitaria, inmigrante, docente o creyente» pero también «más respetuosa, más comprometida y responsable».

«Gracias a todos los madrileños, porque mi vida quedará marcada para siempre por las suyas. Este sentimiento no puede explicarse con palabras. Y me enorgullezco especialmente de los hombres y las mujeres que me han acompañado en este tiempo, mis consejeros, porque han trabajado, créanme, más de quince horas al día en los momentos más complicados vividos en décadas», ha trasladado.

SE NECESITA ILUSIÓN

Ayuso ha defendido que los ciudadanos necesitan «ilusión, convicción, esperanza y orgullo» por lo que han logrado así como «sentir que todo lo que pelean cada día de sus vidas merece la pena, y que ese esfuerzo es digno cuanto menos, de respeto y ojalá pronto, de recompensa».

Por ello, ha asegurado que «aspira a que todos se sientan representados». «El haber obtenido el respaldo mayoritario de ciudadanos de izquierda a derecha, de cualquier edad o condición y en todo el territorio madrileño, no solo nos llena de orgullo, sino también de compromiso», ha manifestado, al tiempo que ha incidido en que espera «no solo no defraudar», sino dejar una Comunidad de Madrid mucho mejor de la que se han encontrado cuando llegó como presidenta.

La ‘popular’ ha subrayado que está comprometida «con el pueblo de Madrid, con la libertad y con España» y, de este modo, ha sostenido que piensa «encarar los próximos dos años mirando por los jóvenes, por los proyectos que llamen a la puerta, por las oportunidades que permitan a todos volar» así como por los mayores. «Es un lujo ser parte de la historia de la Comunidad de Madrid y una gran responsabilidad, que asumo sabiendo la herencia que recibo», ha indicado.

En este sentido, ha aseverado que tiene «un ambicioso programa» de Gobierno, que han expuesto durante la campaña y en el debate de investidura en la Asamblea,» un programa que atiende a los principales retos y prioridades: el empleo, la educación, la salud, la digitalización, la vivienda, las personas maltratadas, los que se quedan atrás, y también los que triunfan y tienen aspiraciones».

«Madrid es un vagón de Metro que transporta a la vez a un padre de familia que sale del trabajo, a una monja, a un hincha del Atleti, a un grupo de amigos que van a un concierto o a una manifestación. Eso es Madrid: una Comunidad de no duerme, que sorprende al mundo», ha apuntado.

Ayuso ha defendido, visiblemente emocionada, que en los próximos dos años no va a cambiar el rumbo de su Gobierno sino que mejorarán «con todo lo aprendido» y allí donde se hayan equivocado, se enmendarán, porque quieren que los madrileños vean que el «ilusionante» 4 de mayo «ha merecido la pena».

RESPALDO DE SU FAMILIA Y DEL PP

La presidenta madrileña, ataviada con un vestido fucsia de la diseñadora Vicky Martín Berrocal, ha llegado puntual, a las 12 horas, a la cita en el patio del edificio de la madrileña Puerta del Sol donde la esperaban alrededor de 90 invitados y en el que ha tomado posesión acompañada por la presidenta de la Asamblea, Eugenia Carballedo.

En el acto ha estado arropada por su familia y amigos así como por el presidente del PP, Pablo Casado, y por los presidentes autonómicos de Galicia, Alberto Núñez Feijóo; de Murcia, Fernando López Miras; el de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco; y el de Andalucía, Juan Moreno. No ha asistido ningún miembro del Gobierno central.

Además, han acudido los expresidentes regionales Esperanza Aguirre, Alberto Ruiz Gallardón, Cristina Cifuentes y Ángel Garrido y los portavoces de los grupos parlamentarios de la Cámara regional. En esta ocasión, no han asistido todos los diputados por las medidas para frenar el coronavirus.

Al concluir el acto, la dirigente regional ha salido a las puertas de la Real Casa de Correos donde se han agolpado ciudadanos que le han dado la enhorabuena y se han fotografiado con ella.