La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha lamentado este miércoles que se acuse a su partido de haberse acercado al Gobierno de Pedro Sánchez cuando es el PP el que pactó con él repartirse los puestos de la dirección de Radiotelevisión Española y Vox «le regaló» el control de los fondos europeos al abstenerse ante el decreto ley que regula esta cuestión.
«Se votó en el Congreso un acuerdo para repartirse el control de RTVE entre el PP, el PSOE y el PNV, pero nadie dice que (Pablo) Casado se ha arrimado a Sánchez», mientras que «Vox regala a Sánchez poder repartir a dedo los fondos europeos sin control ninguno», ha apuntado en una entrevista en esRadio, añadiendo que no por ello les dice a estos partidos que «se han vendido al sanchismo», la acusación que suele recibir Cs.
Además, ha recordado que el PP estuvo negociando con el PSOE la elección de los futuros vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y que finalmente no llegaron a un acuerdo porque «se enquistaron en uno o dos nombres».
«Yo no me he sentado, ni me sentaré, ni cojo el teléfono para repartirme los jueces o RTVE o para dar a Sánchez los fondos europeos sin control», ha subrayado Arrimadas. Por contra, ha defendido que Cs pactara una serie de medidas con el Ejecutivo del PSOE y Unidas Podemos a cambio de apoyar el estado de alarma durante la pandemia del coronavirus y que negociara con él para contener las subidas de impuestos, votando después en contra de los Presupuestos Generales del Estado.
Por otro lado, la líder de Ciudadanos ha asegurado que no tiene «ningún problema con el PP» y ha recordado que son socios de gobierno en dos comunidades autónomas –Andalucía y Castilla y León– y en numerosos Ayuntamientos. Además, ha indicado que Cs tiene «muchos más consensos constitucionales» con los ‘populares’ que con el PSOE, vista la posición actual de este partido.
Por eso, no entiende «por qué el PP tiene orquestada una operación, reconocida públicamente, para atacar a Ciudadanos», que es «un partido bueno para España, constitucionalista», y, a través del exsecretario de Organización de Cs Fran Hervías –que ahora trabaja para el PP–, actúa como ha hecho en el Consistorio de Granada.
Por «rencillas personales» con el antiguo alcalde de esta ciudad, Luis Salvador (Cs), Hervías, junto al PP, «revienta el grupo» municipal de Ciudadanos, «emponzoña todo» y «se carga el Gobierno» de coalición que tenían ambos partidos y que «funcionaba bien», en una «operación chapucera» que hace que «la Alcaldía acabe en un señor imputado del PSOE», Francisco Cuenca, ha explicado.
Arrimadas también ha lamentado que se haya criticado a la formación naranja por lo ocurrido en Murcia, donde el pasado marzo impulsó junto al PSOE sendas mociones de censura contra el PP, su entonces socio, en la Región y en el Ayuntamiento de la capital por el escándalo de los altos cargos vacunados contra el coronavirus y por temas de presunta corrupción.
En el primer caso «salió mal» porque el PP «compró al grupo parlamentario de Cs y a los exdiputados de Vox para hacer un Gobierno sustentado en tránsfugas», pero ante la opinión pública parece que «la culpa es nuestra», lo cual significa que «lo hemos explicado fatal», ha declarado.
En cualquier caso, ha reiterado que no había «un acuerdo con Moncloa para derribar gobiernos de Cs y el PP que funcionaban» en otros lugares, porque en ese caso se habrían impulsado simultáneamente mociones de censura contra los ‘populares’ en la Comunidad de Madrid, en el Ayuntamiento de la capital o en Castilla y León. «No sé si me molesta más que me tomen de traidora o de tonta», ha dicho, señalando que no es que Cs no previera el adelanto de las elecciones autonómicas en Madrid, sino que se comportaron como «socios leales».
PREFIERE GOBIERNOS DEL PP Y Cs DONDE NO ESTÉ VOX
Arrimadas espera que el PP «deje de atacar a Cs», incidiendo en que ambas partes mantienen «una colaboración de gobierno buena» y, además, son «capaces de movilizar a electorados diferentes» en las urnas, pero no ha contestado a la pregunta de si se abre a coaliciones con el PP para los próximos comicios autonómicos y municipales.
Lo que sí ha manifestado es su preferencia por gobiernos de coalición formados solo por el PP y Ciudadanos, sin Vox, como los de Andalucía y el Ayuntamiento de Madrid, porque se ha demostrado que es un modelo de «buena gestión y buenos resultados». En este contexto, ha comentado que tiene «muchas diferencias» con Vox, aunque coincida con él en la defensa de la unidad de España y la oposición al nacionalismo.
A pesar de que Cs votara en contra de la moción de censura que Vox presentó el año pasado contra Sánchez, ha afirmado que ella siempre ha respetado a su presidente, Santiago Abascal, que estuvo en el País Vasco «jugándose la vida» cuando ETA estaba activa, y ha insinuado que Casado sí le faltó al respeto cuando le dijo en el Congreso que había estado «viviendo del PP» durante muchos años.
Respecto a la convención política que Ciudadanos celebra el próximo fin de semana en Madrid, Arrimadas ha precisado que el objetivo es «que se vuelva a poner el foco en las políticas, las reformas para España y los temas que preocupan a la gente», dejando a un lado «los temas de partido internos que no interesan a nadie», y reivindicar la opción «liberal» que representa Cs.
Tras los malos resultados electorales en Cataluña y en Madrid, cree que el partido debe «seguir trabajando y tirar para delante» porque España «es un país mejor con Ciudadanos». Pese a los «sinsabores» de la política, «aquí estamos, aguantando, luchando y con ilusión, porque yo no la he perdido todavía», ha manifestado.
EVITAR QUE UNAS ENCUESTAS BUENAS «SE TE SUBAN A LA CABEZA»
Sobre la negativa del expresidente de la formación naranja, Albert Rivera, a asistir a la convención, ha dicho que lo que él le ha transmitido es que «está fuera de la política y no participa en actos de partido».
Hablando de los pronósticos de las encuestas electorales, Arrimadas ha recordado el momento en que, con Ciudadanos liderando la intención de voto cuando el PSOE presentó una moción de censura contra el Ejecutivo de Mariano Rajoy, en mayo de 2018, el entonces presidente del PP decidió no convocar elecciones generales.
«Rajoy pudo elegir entre su partido y su país y eligió salvar a su partido con tal de que no ganara Cs las elecciones», le ha reprochado.
A continuación, ha agregado que todos los políticos tendrían que ser «prudentes y humildes» y evitar que «unas encuestas muy buenas se te suban a la cabeza». Considera que esos datos van cambiando con el tiempo y que el deber es siempre es «intentar hacer lo mejor para España», como cree que ha hecho en su caso: «Yo me habré podido equivocar, pero todo lo que hecho desde que estoy en política no lo he hecho por mí y por mí carrera política, ni por mi partido, sino por España».