La Generalitat ha solicitado al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) la aplicación hasta el próximo 16 de agosto del toque de queda –entre las 01.00 y las 06.00 horas– en 77 municipios de la Comunitat donde residen 2,6 millones de personas, de manera que esta restricción afectaría aproximadamente a la mitad de la población valenciana.
Así lo ha anunciado el ‘president’, Ximo Puig, en la comparecencia que ha ofrecido junto a la consellera de Sanidad, Ana Barceló, para informar de las medidas aprobadas en la Comisión Interdepartamental de este jueves.
Asimismo, el Gobierno autonómico ha pedido al alto tribunal la autorización para prorrogar la limitación de las reuniones tanto en interior como al aire libre a diez personas.
Además, se apuesta por mantener las medidas sanitarias con tres modificaciones. La primera en que en espectáculos y celebraciones, el aforo se reduce al 50% en interiores con un máximo de 1.500 persones y los eventos concluirán a les 00.30 horas; el aforo en recintos deportivo queda limitado a un 50% con un máximo de 1.500 personas, y en las piscinas recreativas el aforo también se reduce a la mitad.
Puig ha considerado que estas medidas son necesarias ante el empeoramiento de los datos de la pandemia, que ha hecho que en dos semanas se hayan duplicado los ingresos hospitalarios y en UCI. «Sería una irresponsabilidad no poner todo lo que podemos hacer a disposición de la lucha contra la pandemia», ha dicho el dirigente autonómico, que ha recalcado que la Covid siempre va «a por los más vulnerables, que ahora son los no vacunados».
Los municipios propuestos por la Generalitat para estar bajo el toque de queda son los siguientes: en la provincia de Valencia, los municipios de Albal, Alboraia, Alcàsser, Aldaia, Alfafar, Alginet, Almussafes, Benaguasil, Benetússer, Benifaió, Bétera, Buñol, Burjassot, Canals, Chiva, Foios, Gandia, Godella, L’Eliana, L’Olleria, Manises, Massamagrell, Massanassa, Meliana, Mislata, Museros, Oliva, Paiporta, Paterna, Picassent, la Pobla de Farnals, la Pobla de Vallbona, Puçol, El Puig, Rafelbunyol, Requena, Riba-roja de Túria, Rocafort, Sagunto, Silla, Sueca, Tavernes de la Valldigna, Turís, Utiel, València, Vilamarxant, Xeraco y Xirivella.
Por lo que respecta a la demarcación de Alicante, serían L’Alfàs del Pi, Alicante, Banyeres de Mariola, Benidorm, Callosa d’en Sarrià, Callosa de Segura, Calp, Dénia, Gata de Gorgos, La Nucía, Muro de Alcoy, Ondara, Pego, Santa Pola, Sant Vicent del Raspeig, Sax, Teulada y la Vila Joiosa.
Finalmente, en Castellón los municipios previstos son Alcalà de Xivert, Almenara, Benicàssim, Borriana, Borriol, Onda, Oropesa del Mar, Peníscola, Torreblanca, Vila-real y Vinaròs.
Con esta nueva petición, serían ocho las localidades que hace dos semanas tenían toque de queda y que ahora, dejarían de tenerlo: Alaquàs, Almássera, Catarroja, Moncada, Picanya, Quart de Poblet, Sedaví y Tavernes Blanques.
Preguntado Puig por si es optimista frente a la decisión que adopte el TSJCV, ha comentado que el Consell siempre respetará la decisión de la justicia y ha agradecido y reconocido la mira que ha tenido la justicia valenciana de acuerdo con el objetivo de superación de la pandemia.
La consellera Barceló ha concretado que los municipios incluidos en el toque de queda se determinan en base a siete criterios que tiene en cuenta Epidemiología relacionados con la incidencia, la positividad o el índice de reproducción, entre otros. Ha concretado que el nuevo toque de queda, de aprobarlo el TSJCV antes del fin de semana, entraría en vigor el domingo por la noche.
MASCARILLAS Y BOTELLONES
Por otro lado, Puig, preguntado por qué insiste en la importancia de llevar mascarilla cuando no es obligatoria, ha comentado que desde la Generalitat siempre han reiterado que la mascarilla es la protección «más importante» de cada persona ante la pandemia: «Hay espacios al aire libre en que pensamos que no es estrictamente necesaria pero en otros lugares sí», ha dicho.
Así mismo, el ‘president’, interpelado por si está satisfecho con el control que se está haciendo de los botellones, ha manifestado que «los Ayuntamientos están haciendo un esfuerzo extraordinario y debemos intentar concienciarnos de que en este momento no toca», ha dicho, al tiempo que ha recordado que hay normativas de carácter municipal que impiden estas actuaciones.
BARCELÓ, A LES CORTS
Por su parte, Barceló ha avanzado que este miércoles solicitó su comparecencia en Les Corts para explicar la situación sanitaria en la Comunitat y cuando se reúna la Mesa no tendrá «inconveniente» en comparecer «el día que se decida», ha dicho. «No tengo ningún inconveniente en acudir y dar las explicaciones oportunas», ha sentenciado.
Puig ha acabado su intervención con dos peticiones a la ciudadanía: prudencia y corresponsabilidad. «Esta batalla común no está todavía ganada pero lo vamos a conseguir», ha dicho, para agregar que hay que seguir cooperando y cumplir tanto las cuarentenas como los aislamientos. «Son momentos complicados pero ahora tenemos la capacidad de avanzar más rápidamente con la vacunación», ha apostillado.