Marga Prohens ha sido elegida este sábado como nueva presidenta del PP en Baleares, con el 99,72% de los apoyos, tras haberse presentado como única candidata para ocupar este cargo.
Según ha expresado Prohens tras su elección, en el 16 Congreso Autonómico del PP en Baleares, «este es un día importante para el partido y a nivel personal».
Además, ha añadido, «no hay mayor orgullo que iniciar este camino con el presidente del PP, Pablo Casado» a quien le ha asegurado que «Baleares no le fallará para llevarle a la Moncloa», convencida de que «él tampoco lo hará y que juntos devolverán a las Islas al lugar de referencia que nunca deberían haber dejado».
Durante su discurso de proclamación, Prohens ha incidido en que asume este cargo consciente de que «los partidos y sus dirigentes son lo que reciben el encargo de los ciudadanos para representarlos, nunca al revés».
Por ello, ha asegurado que para ella «aceptar este cargo significa dar la cara por miles y miles de ciudadanos que comparten las ideas del PP, que piensan en la moderación y en el diálogo, que quieren ir hacia adelante para resolver desafíos y no arrastrarlos de una manera indefinida».
Además, ha asegurado también querer dar la cara «por todos los que han entendido que esto va más allá de izquierdas y derechas. Por las más de 100.000 personas que quieren y necesitan trabajar y ven ya al PP como su única esperanza».
La nueva presidenta del PP balear ha hecho hincapié en que «hay que poner alfombra roja a los empresarios y emprendedores. Menos burocracia, menos trabas, menos papeleo, y defender a los sectores económicos».
«Basta ya de criminalizar una vez más al sector de la restauración y la hostelería, basta ya de cargarles con toda la responsabilidad de este virus, basta ya de dictar normas y dar lecciones desde la comodidad de un despacho y un sueldo fijo y basta ya de intentar ridiculizarles», ha incidido.
«En una España confusa, en cierto punto caótica, donde hay una evidente crisis de valores, creo hoy más que nunca que no nos hemos de refugiar en la comodidad y en la tranquilidad que da la segunda fila, hemos de dar un paso adelante y asumir el desafío, por eso no podía negarme a aceptar la representación de mi pueblo», ha recalcado.
Así, ha añadido que «el PP es un partido de gestión pero también de ideología, es un partido moderno que mira a la derecha europea, y va a dar todas las batallas, sin entregar ninguna de las banderas de las que se ha apropiado la izquierda, como las de la sostenibilidad, el medio ambiente, los derechos sociales y la igualdad».
«Porque detrás de todas estas políticas está la gestión; la propaganda sin gestión es engaño y esto es lo que vienen haciendo. Y lo haremos desde la moderación, desde la centralidad, pero moderación no es ausencia de principios ni ser tibios y la centralidad no la marcan aquellos que son capaces de pactar con lo más radical de esta sociedad o incapaces de decir que lo que hay en Cuba es una dictadura», ha enfatizado.
Este proyecto que ofrece el PP balear a la sociedad de estas islas es un proyecto de una formación «pegada a la tierra, con un acento y un carácter propio que defienda las particularidades, la cultura, la lengua y la historia de estas islas, dentro de un gran proyecto nacional, plural, diverso, respetuoso».
En esta línea, la elegida como nueva presidenta del PP en Baleares ha dicho cree en el estado de las autonomías pero, ha advertido, «ser consciente que esta autonomía sigue arrastrando problemas importantes, algunos nuevos, pero otros añejos, que parece que van cambiando de mesa, se envuelven de otra manera, pero siguen allí».
Por este motivo, ha considerado que «se necesita mejorar la regulación urbanística, promover la creatividad cultural, apoyar a las empresas, pero de verdad, crear una administración autonómica eficiente, mejorar las infraestructuras de comunicación y transporte, resolver el problema de la vivienda, profundizar en la transición ecológica. «Hace falta defender algo tan bonito como la insularidad, la doble y la triple también», ha hecho hincapié.
Si bien, ha matizado, esto «no ha de suponer una merma en la recepción de los servicios para los ciudadanos, puesto que Baleares quiere ser como el resto de las autonomías en el acceso a servicios públicos, ni más ni menos y para ello se debe compensar a los funcionarios y a los cuerpos y fuerzas de seguridad».
«Queremos un sistema de financiación justo, negociado con luces y taquígrafos, entre todos, no un trato fiscal preferente con el independentismo catalán que deje a esta tierra solo con las migajas», ha expresado y ha remarcado que «es necesario un régimen económico y fiscal especial, pero de verdad, como el que firmó el PP y devolvió por puro sectarismo Francina Armengol al gobierno de España. Como el segundo que negoció también el PP y que paralizó Pedro Sánchez porque el suyo tenía que ser infinitamente mejor, es tan infinito que no lo hemos llegado a ver».
COMPANY ASEGURA QUE «LA ELECCIÓN DE PROHENS ES LA ANTESALA DE GRANDES ACONTECIMIENTOS»
Por su parte, el ya expresidente del PP balear, Biel Company, ha augurado que «la elección de Prohens es la antesala de grandes acontecimientos» y, ha añadido, «garantía de bienestar para los ciudadanos de esta tierra» cuando los ‘populares’ vuelvan a gobernar en las instituciones.
«Todos mis deseos son que Marga Prohens se la próxima presidenta de Baleares y que Pablo Casado lo sea en España» porque esto, ha apuntado, «será sinónimo de un futuro provechoso para Baleares y para España», ha asegurado Company, quien ha solicitado tanto a aquellos que son militantes como a los simpatizantes de los ‘populares’ en Baleares que «no paren de empujar» hasta que la nueva presidenta del PP balear, de quien ha destacado que es «una mujer inteligente y trabajadora», logre «estar sentada en el Consolat de Mar».