El calor ha llegado este año «antes que nunca» a más del 80% de las metrópolis asiáticas, según se desprende de un estudio realizado por Greenpeace que busca averiguar el porqué de los golpes de calor en los Juegos Olímpicos, para lo que ha analizado los datos de temperatura de 57 ciudades en China continental, Corea y Japón.
«Durante las últimas dos semanas hemos visto colapsar a varios atletas olímpicos en Japón debido a golpes de calor. Estos eventos de calor extremo son consistentes con el clima cambiante de la región. Este tipo de temperaturas extremas serán cada vez más frecuentes a menos que los Gobiernos hagan una apuesta firme por el fin de los combustibles fósiles y cambien a un sistema sustentado por fuentes de energía más limpias, incluidas la eólica y la solar», ha señalado el responsable de la campaña de Emergencia Climática de Greenpeace Asia Oriental, Mikyoung Kim
Según la investigación de Greenpeace, las ciudades de la región están experimentando olas de calor cada vez «más graves y frecuentes». Así, en Tokio y Seúl, el primer día caluroso del año (de 30 °C o más) llegó un promedio de 11 días antes durante el período 2001-2020 en comparación con las dos décadas anteriores. En Shanghai, el primer día caluroso llegó 12 días antes, mientras que en Sapporo, por ejemplo, avanzó 23 días completos.
El análisis también muestra que, entre 2001 y 2020, la frecuencia de las olas de calor en Pekín fueron casi tres veces mayor que la del período anterior de 40 años. En Tokio, el número de días con una temperatura de 33 °C o más se ha duplicado desde 1960.
En todo el mundo, entre 2000 y 2018, las muertes relacionadas con el calor en personas mayores de 65 años aumentaron en un 54%, añade la investigación.