El planteamiento del presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, de establecer un nuevo impuesto para la Comunidad de Madrid por su capitalidad, que encontró ayer su aval en el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha dado este viernes un nuevo vuelco al encontrarse con el rechazo frontal de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y de varios Ejecutivos autonómicos, partidos aliados del PSOE como Compromís, o incluso federaciones territoriales socialistas.
De hecho, la ministra Montero ha querido zanjar esta polémica desautorizando tajante a Escrivá y negando que el Gobierno central tenga en mente asumir el planteamiento de Ximo Puig para crear un impuesto específico para las rentas altas de la Comunidad de Madrid ante el efecto capitalidad.
«NI ESTÁ EN AGENDA NI LO ESTARÁ NUNCA»
«Esa propuesta no está en la agenda del Gobierno, ni lo va a estar nunca», ha zanjado este viernes la responsable del Ministerio de Hacienda, pese a que el día anterior su compañero en el Ejecutivo, el ministro José Luis Escrivá, había asegurado que el planteamiento de Ximo Puig tiene «mucho recorrido».
El presidente valenciano planteó hace unas semanas la creación de un impuesto que iría solamente destinado a las rentas altas de la Comunidad de Madrid. Puig defendió este nuevo tipo impositivo alegando que serviría para compensar al resto de comunidades autónomas el efecto capitalidad que tiene la Comunidad de Madrid.
Pero no solo María Jesús Montero ha salido al paso de este planteamiento avalado por Escrivá, también varios Ejecutivos autonómicos, algunos gobernados por el PSOE, han avanzado su rechazo a la propuesta de implantar un impuesto específico para una determinada región.
GOBIERNOS DEL PSOE HABLAN DE «OCURRENCIA»
En este contexto, el Ejecutivo extremeño de Guillermo Fernández Vara ha calificado de «ocurrencias» que crean «confrontación» las propuestas que hablan de crear un impuesto específico a Madrid para compensar al resto de autonomías por el efecto de la capitalidad.
En parecidos términos se ha expresado el Gobierno de Aragón, del socialista Javier Lambán, que estima necesario valorar el efecto de la capitalidad de España sobre la economía y estudiar alternativas aplicadas en otros países, pero no se muestra partidario «de imponer tasas específicas a ninguna comunidad autónoma, sea la que sea».
Otro Ejecutivo socialista que rechaza el planteamiento de Puig ha sido el de Castilla-La Mancha de Emiliano García-Page. Desde la Junta ven con buenos ojos hacer un «esfuerzo» de armonización fiscal, aunque se muestran contrarios a que «se imponga una tasa a un territorio concreto».
TAMBIÉN DE REVILLA, FEIJÓO Y MAÑUECO
La propuesta de Puig también ha encontrado el rechazo en el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, aunque se ha mostrado contrario con las rebajas fiscales que aplica esta comunidad y ha abogado porque se pague la misma cantidad de tributos en todo el país.
En el caso del presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Nuñez Feijóo, ha calificado de «evidente equivocación» la propuesta de Ximo Puig para este impuesto específico en Madrid, del que ha dudado de su «constitucionalidad».
Por su parte, desde la Junta de Castilla y León, del ‘popular’ Alfonso Fernández Mañueco, aseguran que a la región le perjudicaría que se le obligara a subir impuestos o que aumentará la gravación fiscal, al tiempo que dejan claro que desde Castilla y León no se pide que se incremente los impuestos en otras comunidades, pero si demanda al Gobierno nacional una política fiscal favorable al medio rural.
RECHAZO DE LOS PARTIDOS EN MADRID, TAMBIÉN DEL PSOE
Además del rechazo frontal a esta propuesta que proclamó la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, varios partidos de la oposición en la Asamblea han mostrado sus dudas respecto al planteamiento de Ximo Puig.
Es más, la portavoz del PSOE madrileño, Hana Jalloul, ha asegurado que defienden «un sistema de financiación justo y equitativo para todas las autonomías», pero no de poner «impuestos especiales» a los madrileños.
«Quiero dejar claro que el grupo socialista está a favor de una sistema de impuestos justo y equitativo. Quienes más ganan deben ser los que más aporten para el bienestar de todos, pero estamos en contra de establecer unos impuestos especiales para los madrileños», defiende la portavoz de la federación del PSOE en Madrid.
MÁS MADRID Y COMPROMÍS ACONSEJAN OTRAS COSAS
Por su parte, el diputado y senador de Más Madrid, Pablo Gómez Perpinyà, ha indicado que hace falta «afinar y aclarar» la propuesta de Ximo Puig de estudiar un impuesto a las rentas altas de la Comunidad de Madrid para compensar al resto de autonomías el efecto capitalidad.
Puig ha encontrado también el rechazo a esta propuesta dentro su propio Ejecutivo. En concreto, la vicepresidenta de la Generalitat Valenciana, Mónica Oltra, de Compromís, no es partidaria de implantar un «impuesto a los ricos de Madrid» y prefiere establecer una «legislación básica que no permita a ningún territorio hacer dumping fiscal» al resto.
Pero aunque no sea partidaria de implantar un «impuesto a los ricos de Madrid», Oltra sí considera que «es importante abrir debates y reflexiones para llegar a conclusiones». A su juicio, «quien sufre» es la población que vive en la Comunidad de Madrid, ya que «allí tiene más consideración alguien que se pone el domicilio ficticiamente para evadir impuestos que una persona que vive allí». «¿Quién son los madrileñófobos?», se ha preguntado.