El CSN informa al Parlamento del correcto comportamiento de las instalaciones reguladas en 2020

El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha remitido al Congreso y al Senado su informe anual, en el que se detallan las actividades desarrolladas por el organismo el pasado año y en el que se pone de manifiesto el correcto comportamiento de las instalaciones reguladas en 2020.

En el documento, el organismo se recoge como, tras la declaración del estado de alarma por el Covid-19, el CSN adaptó su actividad para dar continuidad al desempeño de sus funciones y preservar así la seguridad nuclear y la protección radiológica de las instalaciones en materia de su competencia.

Entre las principales actividades llevadas a cabo en 2020, en el ámbito estratégico-organizativo el Consejo señala la aprobación del Plan Estratégico del organismo para el periodo 2020-2025.

A este respecto, explica, se ha iniciado la puesta en marcha de tres proyectos estratégicos de destacable relevancia para el Consejo: la evaluación de cultura de seguridad del CSN, el desarrollo e implantación de una metodológica de aproximación sistemática en la formación, y el desarrollo de un plan de transformación digital del organismo.

RENOVACIONES

En el ámbito de la seguridad nuclear, destaca el informe favorable del CSN a las renovaciones de las autorizaciones de explotación de las centrales nucleares Almaraz (Cáceres) y Vandellós II (Tarragona), así como la puesta en marcha en el parque nuclear español de planes de prevención y contingencia en relación con la respuesta a la situación de crisis sanitaria.

Tal y como indica el CSN, estos posibilitaron el correcto funcionamiento que, de manera general, han presentado las instalaciones nucleares y radiactivas en España, operando de forma segura y garantizando la protección radiológica de los trabajadores, la población y el medio ambiente.

En relación a la protección radiológica, el Consejo señala de «especial interés» la puesta en marcha d la instalación de protonterapia en la Clínica de la Universidad de Navarra en Madrid; el inicio de la evaluación de la solicitud para la autorización de la primera fase del desmantelamiento de la central Santa María de Garoña (Burgos); así como la colaboración establecida con el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico para elaborar el Real Decreto sobre control y recuperación de fuentes radiactivas huérfanas.

RELACIONES INSTITUCIONALES

El informe se refiere además a las relaciones institucionales que, según detalla el texto, estuvieron marcadas por la pandemia. Sin embargo, el CSN indica que mantuvo sus relaciones con el Parlamento procediendo a enviar los informes surgidos de las resoluciones periódicas. Del mismo modo, se mantuvieron las relaciones con las comunidades autónomas a través de las comisiones mixtas de seguimiento y de forma telemática.

En este sentido, han recordado que se firmaron convenios con varias de ellas y se dio luz verde al acuerdo con la Asociación de Municipios en Áreas de Centrales Nucleares y de almacenes de residuos radiactivos (AMAC).

En el ámbito de las relaciones internacionales, el CSN destaca que el Grupo Europeo de Reguladores de Seguridad Nuclear (ENSREG) aprobó la realización de la segunda revisión temática para la seguridad (Topical Peer Review, TPR) que se centrará en la protección contra incendios en instalaciones nucleares. Asimismo, progresaron los proyectos de asistencia técnica al amparo del Instrumento de Cooperación en Seguridad Nuclear de la Comisión Europea, con especial mención al proyecto con Marruecos.

En el caso del Foro Iberoamericano de Organismos Reguladores Radiológicos y Nucleares (FORO) se aprobó el inicio de una nueva actividad sobre la resiliencia de instalaciones nucleares y radiactivas en condiciones de pandemia.

PRIORIZAR LA INFORMACIÓN

Finalmente, el CSN muestra en el informe su prioridad en lo que tiene que ver con informar sobre sus actividades, tanto para facilitar la labor de control del Parlamento, como para acercar dicha información al público en general.

En este sentido, y en aras de una mayor transparencia, a pesar de los inconvenientes creados por la situación sanitaria, el organismo destaca que incrementó en 2020 su nivel de información, publicando una noticia cada dos días y aumentando la actividad de las redes sociales en las que está presente.

También señala que durante el año pasado se atendieron más de 1.700 consultas del buzón de comunicaciones (un 9,86% más que el año anterior) y se puso en marcha un boletín interno para facilitar la comunicación con los empleados en modo de trabajo remoto.