Las actuales restricciones continuarán en Euskadi porque la situación epidemiólogica ha mejorado, aunque no «lo suficiente», ante el riesgo de rebrotes que pueden producirse en las fiestas patronales de los distintos municipios vascos, y en un contexto en la que la variante Delta, de alta contagiosidad, supone el 90% de los casos positivos de covid-19.
Así lo ha determinado la Comisión Científico-Técnica del Plan de Protección Civil de Euskadi (LABI) en su reunión de trabajo celebrada este jueves, en la que ha constatado la necesidad de que, aunque no se vayan a celebrar las fiestas en este segundo año de pandemia, no debe programarse «nada que provoque concentraciones de personas en número y manera no controlados y con riesgo de no cumplir con las medidas preventivas».
Además, ha instado a las instituciones vascas a que llamen a extremar cautelas de cara al fin de semana y al resto de agosto para evitar «retrocesos» en la incidencia del coronavirus.
La mesa técnica del LABI ha señalado, en una nota, que, desde la evaluación que realizó el pasado 5 de agosto, los indicadores y la evolución epidemiológica confirman el cambio de tendencia en cuanto a la Tasa de Incidencia Acumulada.
No obstante, ha indicado que esta mejoría no se observa todavía en otros indicadores que en esta onda «adquieren importancia», como son la ocupación hospitalaria y de camas UCI.
Asimismo, considera que los datos de situación epidemiológica que dieron lugar a las medidas establecidas en el Decreto de 22 de julio del Gobierno Vasco no han mejorado todavía «lo suficiente» como para plantear en este momento su modificación, en función de las características del periodo vacacional.
En este sentido, ha remarcado que estas restricciones se adoptaron con una Tasa de Incidencia Acumulada en 14 días de 682/100.000 y con 48 camas UCI ocupadas, mientras que hoy la tasa es de 603/100.000 y existen 64 camas UCI ocupadas.
La Comisión Técnica tiene en cuenta, además, «los riesgos añadidos que plantea la mayor contagiosidad de la variante Delta, responsable de más del 90% de las infecciones por SARS-CoV-2 que actualmente se producen en Euskadi».
FIESTAS PATRONALES
Tampoco quiere «obviar, según la experiencia acumulada en las últimas semanas, que este próximo fin de semana y días siguientes, coincidiendo con el 15-16 de agosto y posteriores, se celebrarían en un gran número de localidades de Euskadi sus fiestas patronales».
Tras destacar que, en la mayor parte de los casos no habrá programa de fiestas», por lo que «no debería programarse nada que provoque concentraciones de personas en número y manera no controlados y con riesgo de no cumplir con las medidas preventivas», ha añadido que «es de temer que serán, previsiblemente, ocasión de un incremento de encuentros e interacciones sociales de riesgo».
«Tanto este fin de semana como durante el calendario de fiestas suspendidas del resto del verano, corremos el riesgo de rebrotes, similares a los que se produjeron con motivo de las celebraciones de los sanjuanes, o del fin de curso y de los exámenes de selectividad», ha advertido.
A su juicio, estos rebrotes que ya se han empezado a notar, «podrían modificar la actual tendencia a la baja en los distintos indicadores», y se traducirían «en infecciones, enfermedad, hospitalizaciones, ingresos UCI y fallecimientos».
RECOMENDACIONES
Por ello, la Comisión Técnica del LABI reitera «la necesidad de mantener, sin modificación, las medidas en vigor establecidas en el Decreto de 22 de julio», en base a dos razones. La primera de ellas es que, tal como ha explicado, «el descenso en las tasas de incidencia no es todavía suficiente y la situación con respecto a la ocupación hospitalaria y de camas UCI no mejora todavía lo necesario».
En segundo lugar, subraya que el peligro de incremento de las interacciones sociales «de riesgo en este periodo sigue siendo alto y es preciso mantener todas las precauciones».
Por ello, insta a todas las instituciones representadas en el Consejo Asesor del LABI «a que hagan, de manera general y cada una en su ámbito de responsabilidad, un llamamiento a la ciudadanía a extremar todas las cautelas en el contexto del calendario propio de este fin de semana y del resto del mes de agosto para evitar nuevo rebrotes y retrocesos».
«En concreto, cuando hablamos de extremar las cautelas, nos estamos refiriendo a actitudes sencillas pero fundamentales como las siguientes: mantenerse la tensión, el compromiso y la responsabilidad principalmente en el uso de mascarilla, el mantenimiento de la distancia interpersonal de seguridad y la evitación de cualquier tipo de aglomeración de personas, tanto en interiores como en exteriores», remarca. También emplaza a «la autolimitación en la movilidad nocturna» y no ingerir alcohol en la calle, que está prohibido.
LLAMAMIENTO A LA VACUNACIÓN
La Mesa Técnica del LABI cree «fundamental» que la ciudadanía «siga participando con la mayor celeridad posible en el proceso de vacunación». Del mismo modo, considera de «importancia crucial» la colaboración de la ciudadanía con la tarea de las personas de los equipos de rastreo y el cumplimiento estricto de aislamientos y cuarentenas.
En definitiva y a modo de conclusión, el mensaje del Plan de Protección Civil del LABI «en vísperas del fin de semana del 15 de agosto y del resto del verano, no puede ser de relajación, sino de llamamiento a la responsabilidad y a la prudencia».
La Comisión Científico-Técnica del LABI continúa haciendo un seguimiento diario de la evolución epidemiológica. Complementariamente, mantiene sesiones de trabajo cada semana durante el mes de agosto para valorar y evaluar la pertinencia de mantener o modificar las medidas en vigor.