Murcia: «Sí se han detectado ciertas zonas con hipoxia» en el Mar Menor

La directora general del Mar Menor, Miriam Pérez, ha dicho este jueves que en los análisis realizados en días posteriores al pasado lunes, cuando aparecieron peces alevines muertos en la orilla de la zona sur del Mar Menor, «sí se han detectado ciertas zonas», más en el interior, «con hipoxia».

En rueda de prensa, Pérez ha explicado que las primeras mediciones mostraron un incremento de cerca de tres grados en la temperatura del agua, si bien los valores de oxígeno «no eran significativamente bajos», en línea con los resultados obtenidos la semana pasada, cuando la monitorización no reflejó un «descenso alarmante» de los niveles.

«Sin embargo, avisábamos de que una ola de calor extremo, por ejemplo, sí que podría provocar un cambio de tendencia», ha apuntado la directora general, quien ha destacado que «llevábamos semanas avisando de que un cambio en las condiciones podría provocar una ruptura del ecosistema con graves consecuencias».

Este «temor» está basado, según ha añadido Pérez, en las aportaciones de la comunidad científica, que, «de forma reiterada», viene alertando de que «si no cesa el volumen de agua dulce con nutrientes que entra, día a día, se podría producir un problema de anoxia».

Así, tras el lunes –primer día en el que aparecieron peces muertos en la orilla– se sucedieron días en los que «sí se han detectado ciertas zonas con hipoxia, que es un oxígeno bajo que podría haber contribuido a esta situación».

«Nosotros en todo momento hemos trasladado la información basada en mediciones científicas, rigurosas, tanto de la Consejería como las universidades e instituciones que llevan desde el lunes en el mar tomando las muestras nos han ido trasladando», ha agregado Pérez.

La directora general ha recordado que, tras el episodio de mortandad de 2019, el Consejo de Gobierno de la Región de Murcia aprobó un conjunto de medidas urgentes entre las que se encontraban las pruebas de oxigenación para actuar en zonas con bajos niveles de oxígeno.

De esta forma, se elaboró un método de actuación que se envió al Ministerio, «dado que es Costas del Estado quien autoriza cualquier actuación dentro de la masa de agua». «La respuesta fue un conjunto de trabas e impedimentos que hacían imposible una prueba de oxigenación. Incluso pedimos auxilio a la Delegación del Gobierno para poder contar con los medios de SASEMAR pero tampoco obtuvimos respaldo», ha precisado.

En este contexto, Pérez ha señalado que la sensación del Ejecutivo murciano es la de «estar totalmente abandonados por parte del Gobierno de España», porque, entre otros asuntos, «no nos ha permitido hacer nuevas pruebas de oxigenación, lo que supondría un grandísimo avance».

Por ello, el Gobierno regional ha enviado nuevamente una carta al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico en el que pregunta «qué piensa hacer en caso de que los niveles de oxígeno empeoren y si tienen previsto actuar o nos va a permitir hacerlo a nosotros».

«No se trata de entrar en ninguna polémica ni de guerra entre administraciones; se trata de dar respuesta urgente a un problema que podemos encontrarnos en el Mar Menor y esperamos su pronta respuesta», ha agregado.

Por otro lado, ha lamentado las actuaciones de algunos vecinos de la zona y plataformas y las ha tachado de «intolerables», pidiendo respeto a los trabajadores que contribuyen a la recuperación de la laguna. Y es que, critica, «le están tirando los capazos que utilizan para retirar la biomasa al agua y esto no se puede permitir».

RECLAMACIONES AL GOBIERNO CENTRAL

El Gobierno regional ha reclamado a la Secretaría de Estado de Medio Ambiente «un protocolo para hacer frente a un posible episodio de anoxia en el Mar Menor», y le ha requerido para que, en virtud de sus competencias, «realice las actuaciones que considere necesarias para paliar los daños que este nuevo episodio pueda provocar sobre el ecosistema».

Al respecto, la Comunidad pone a su disposición todos los datos monitorizados y recabados hasta la fecha que pueda precisar para el desarrollo y puesta en marcha de las citadas actuaciones.

A la vista del episodio de mortandad de peces de los últimos días, la Universidad Politécnica de Cartagena y los servicios de la Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente han realizado campañas extraordinarias, y han detectado ciertas zonas con poco oxígeno.

Ante esta situación, solicita a la Secretaría de Estado de Medio Ambiente que «indique qué se puede probar o qué se puede hacer si se diera un nuevo episodio de anoxia, para no encontrarnos nuevamente ante una negativa a proyectos propuestos desde la Comunidad que puedan ayudar a minimizar el daño al ecosistema».

Según los técnicos de la Consejería y la comunidad científica, «la caída de los valores de oxígeno afecta de manera especial a especies de peces más sensibles por su estadio de crecimiento (alevines), y provoca migraciones de las especies hacia zonas más oxigenadas, lo que sumado al incremento de las temperaturas influye en la mortalidad de las mismas al estar más expuestas a radiación solar», destaca.

Los datos tomados la pasada semana sobre el estado del Mar Menor no reflejaban una falta de oxígeno, pero «tal y como se venía advirtiendo, un aumento de las temperaturas, como el que se produjo en los últimos días, podía dar lugar a esa falta de oxígeno, como se ha constatado en determinadas zonas tras el episodio de mortandad registrado», precisa.

Asimismo, el Departamento de Ingeniería Química y Ambiental de la UPCT y el Departamento de Ecología e Hidrología de la UMU indican que no hay una situación de estratificación de la columna de agua como la ocurrida en octubre de 2019, aunque sí existen zonas de muy poco oxígeno en el fondo que podrían haber contribuido a la mortandad de peces tras el gran incremento de temperaturas, que pasaron de algo más de 28 grados a cerca de 31 en dicha zona.

En los diferentes informes de seguimiento del estado ecológico del Mar Menor se solicita la priorización y la realización de actuaciones urgentes, ya que, «aunque la pérdida de calidad del agua es normal a mediados de verano, la respuesta del ecosistema puede depender de condiciones ambientales y de la entrada de nutrientes, advirtiendo que este año es posible que el sistema tenga dificultades para recuperarse y, si se producen lluvias torrenciales a final de verano, podrían repetirse las circunstancias de 2019».

Asimismo, la clorofila ha mostrado un incremento notable de concentración del 19 de julio al 2 de agosto, mostrando claramente la cubeta sur los niveles más claros de eutrofización.

Por su parte, el profesor de ecología de la Universidad de Murcia, Ángel Pérez Ruzafa, preguntado sobre las labores de oxigenación del agua, considera que se trataría de un «esfuerzo enorme que no resuelve el problema más que puntualmente durante un tiempo muy limitado».

Otra de las propuestas como la succión de la bolsa de acumulación de materia orgánica «podría ser efectiva» pero advierte que los sedimentos del Mar Menor «tienen contenidos de materia orgánica muy alta y si esto se resuspendiera provocaría una mayor anoxia y no habríamos resuelto el problema, sino que empeoraría».

A su juicio, «si no se gestiona bien el acuífero y la entrada de agua por ramblas estaremos continuamente en riesgo y las olas de calor continuarán produciendo problemas».

Para concluir, Pérez ha dejado claro que el presidente Fernando López Miras «está trabajando e informado de lo que está pasando y hoy, a las 7.00 horas, con el profesor Gilabert ha comprobado en barco cómo se encuentra la laguna».

«Lo que no sé, ha finalizado, es dónde están otras personas, como la ministra Teresa Ribera; no la he visto preocupada por el Mar Menor, ni al delegado del Gobierno ni al secretario de Estado».