El vicepresidente de la Junta de Castilla y León y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio, y Ordenación Exterior, Francisco Igea, ha asegurado este miércoles que la Administración regional trabaja con las organizaciones de acogida para asegurar la vacunación contra el COVID-19 de los 221 afganos que se encuentran en la comunidad, así como la enseñanza del español y la escolarización de los menores.
Así lo ha señalado Igea este miércoles en declaraciones tras la conclusión de la primera reunión de la Comisión de Coordinación de ayuda a los Refugiados Afganos que él mismo ha presidido.
Igea ha asegurado que ofrecerán «toda la ayuda necesaria» a estas 221 personas que han llegado en las últimas semanas a la comunidad y ha explicado que ya coordinan labores como la vacunación contra el COVID-19, la escolarización de los niños en edad escolar –un 45 por ciento de los refugiados son menores–, y la enseñanza del español a las personas que lo necesiten para también favorecer la búsqueda de empleo.
El objetivo, ha recalcado el vicepresidente de la Junta es «hacer todo lo posible» para ayudar a la integración de estas personas en la sociedad y «a la mayor brevedad» convocará a las organizaciones que trabajan en la acogida de este grupo de personas para conocer si es preciso alguna «ayuda específica».
Se trata, concretamente, de 221 personas, la mayoría de ellas en familia –son 38 núcleos familiares–, ya que solo dos mujeres han llegado solas y con una gran presencia de menores.
A este respecto, Francisco Igea ha señalado que según lo que le han trasladado las organizaciones, Castilla y León está «casi al límite de la capacidad», salvo alguna organización que todavía tiene «un poco más» de margen. Eso sí, ha apuntado que «no parece» que por ahora vaya a incrementar el número de refugiados que lleguen a la comunidad.
Francisco Igea se ha mostrado «muy contento» de poder ofrecer ayuda «en este desastre» y ha rechazado «vender ésto como un éxito» y expresiones como «misión cumplida», la que empleó hace unos días el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, en su visita a la base aérea de Torrejón de Ardoz tras finalizar la tarea de evacuación de refugiados llevada a cabo por el Ejército español.
«No es ningún éxito, es un fracaso internacional del que nosotros también somos responsables, la huida masiva de unas personas. Nadie quiere abandonar su país, ni huir del terror que produce el establecimiento de un régimen teocrático que no respeta los derechos fundamentales», ha aseverado.
En su opinión «la misión no era ésta» y ha reflexionado que se trata de un «fracaso de Estados Unidos y de Europa«, la cual considera que debe «reflexionar sobre su papel en el Mundo» porque «la misión ha fracasado» y hoy se trata de «paliar» ésta situación y ser corresponsables con quienes ayudaron en Afganistán.
Sobre la Unión Europea ha añadido que la respuesta debe ser coordinada porque ha advertido de que «se juega su futuro» y el asunto de los refugiados ha «generado problemas». Por ello, en este momento entiende que Europa debe decidir su apuesta «por lo cree, los derechos humanos y una política responsable».
En asuntos más concretos, ha precisado que los menores «siempre son bien recibidos» y ha asegurado que no habrá problema en la asistencia sanitaria ni en la escolarización, con el objetivo de que comiencen lo antes posible.
Ha añadido también que ha habido ofrecimientos para la enseñanza del idioma, una tarea en la que se ofrecerá ayuda a quienes lo requieran.
En el encuentro han estado presentes representantes de la Consejería de Empleo, pero al respecto del trabajo ha recordado que ya se dijo antes de esta crisis al secretario de Estado que «uno de los problemas crónicos» con los refugiados es que se les reconozca el asilo para poder trabajar algo que afirma que «impide» la legislación española. Por ello, ha reclamado que hagan lo posible por acelerar esos trámites o que se dé la posibilidad de integrarlos laboralmente durante un período.