La importancia de un certificado DDD para las empresas

Los insectos y los roedores son asquerosos, pero conviven con nosotros y por eso en muchos lugares abiertos al público se exige que cuenten con un certificado de plagas DDD, el cual acredita que se han llevado a cabo una serie de tratamientos para que no proliferen estos animales que todos queremos lejos.

Este certificado también asegura que se han destruido microorganismos patógenos, pues tan peligrosos para nuestra salud son los animales que vemos como los organismos que solo se pueden observar con un microscopio.

¿Qué significan las siglas DDD?

Las siglas DDD son el acrónimo de desinsectación, desratización y desinfección. Con estas tres acciones se consiguen entornos seguros, impidiendo que aparezcan los insectos, evitando y eliminando los roedores y haciendo lo propio con virus, bacterias y hongos.

Hay empresas que están obligadas a contar con el certificado

Existen empresas que están obligadas a tener un certificado DDD o de control de plagas, aunque lo cierto es que lo mejor es consultar las normativas municipales, pues el tipo de negocio que debe poseer el certificado cambia dependiendo de cada ayuntamiento.

Por norma general, todo establecimiento que está abierto con carácter permanente y en el que se elaboren, vendan y sirvan alimentos y bebidas tienen que contar con este documento, y también lo deben poseer lugares como las peluquerías, los tanatorios, las piscinas, los gimnasios, los centros de tatuaje, las escuelas infantiles e incluso los centros de estética.

¿Cada cuánto hay que renovar el certificado?

El certificado DDD tiene una validez de un año y se debe tener siempre que el negocio esté en funcionamiento.

Cuando buscamos una empresa de control de plagas en Madrid debemos saber que no podemos contratar a cualquiera, pues para que el certificado sea válido, quien lo emite tiene que estar homologado por el Ministerio de Sanidad. En el caso de Madrid, la autorización y la homologación se la da a la empresa la Consejería de Sanidad.

Es importante recalcar esto, pues si la empresa que nos da el certificado no está homologada tendremos que llamar a otra y pagar dos veces por el servicio.

¿Cómo se expide el certificado?

Antes de expedir el certificado DDD hay que hacer una inspección previa de las instalaciones, pues los problemas de una panadería no son los mismos que los de un gimnasio. Mientras la primera tendrá que luchar contra insectos y roedores, la segunda peleará sobre todo con los microorganismos.

Localizados los problemas se elabora un documento en el que se detalla el tratamiento, qué plazos hay, cómo se hace, etc.

Después es cuando se hace el tratamiento, siempre con productos que están homologados por el Ministerio de Sanidad, pues no hay que olvidar que se van a usar sobre todo en lugares en los que se preparan alimentos y bebidas, lo que significa que hay que poner un cuidado especial para que no afecten a las personas que se van a llevar a la boca esos productos después de la desinfección.

Una vez hecho todo esto ya se expide el certificado para un año, que es el que nos pedirán las autoridades.