¿Sabes cómo lidiar con las espinillas negras?

Los adolescentes son quienes más sufren la visita de brotes de acné y espinillas negras. Muchos de ellos deben enfrentarse de la noche a la mañana a un problema totalmente desconocido y que en ocasiones tratan de solucionar estrujando el propio grano. Esto último supone un craso error pues las infecciones por este tipo de intervenciones están a la orden del día.

Por lo tanto, conviene desterrar estas prácticas y poner en marcha otros rituales de demostrada eficacia que pueden servirnos para atajar una alteración cutánea que afecta a la autoestima de la persona que la sufre.

Pero ¿qué son las espinillas?

Casi todos tenemos una noción general de lo que son las espinillas negras, pero quizás no sepamos definirlas adecuadamente. En concreto, estamos ante unos comedones en cuya superficie se aprecia un punto oscuro o negro.

Esta alteración surge cuando se origina una obstrucción o un tapón en el poro del folículo piloso de la piel. Poco a poco las células muertas y la oleosidad de la piel se van depositando en el poro del folículo de la piel y forman un bulto denominado comedón. Si la piel que existe sobre el bulto se abre, el aire lo oxida y lo oscurece. Es entonces cuando hablamos de espinillas negras.

Aunque con frecuencia se presentan en el rostro, también podemos observarlas en la espalda, el pecho, el cuello, los brazos y los hombros.

¿Cómo podemos prevenirlas?

Una vez que tenemos claro en qué consisten, conviene abordar su prevención. Así, la recomendación de los dermatólogos es que nos centremos en una eficaz limpieza facial a diario, pues así eliminaremos la suciedad y el sebo que puede acumularse en los poros.

Además, deberíamos de manera adicional realizar una limpieza más profunda una o dos veces por semana.

Por fuera, pero también por dentro

Pero hay muchas más pautas que podemos incorporar a nuestra rutina de cuidado y que tienen que ver directamente con nuestra alimentación. De esta manera, deberíamos procurar seguir estas sugerencias:

  • Una óptima hidratación, pues de esta manera mantendremos limpios los poros.
  • Alimentos antioxidantes.
  • Ácidos grasos insaturados.

En el caso de que sea un problema muy persistente, las espinillas pueden ser tratadas oportunamente por cremas que contengan ácido salicílico o tretinoína. Por supuesto, un experto en dermatología puede ocuparse de ellas y extraerlas.

Otros consejos apuntados por los médicos del área resultan muy adecuados para combatir el problema. Además, apenas requiere esfuerzo ponerlos en práctica. Así, podemos hablar de lavado frecuente del cabello –en el caso de tenerlo graso–, evitar tocarse la cara o cambiar regularmente las fundas de la almohada.

No obstante, para casos más graves de acné puede ser necesario un mayor despliegue de esfuerzos que incluye, sobre todo, la intervención de dermatólogos para que se decanten por alguno de los diversos tratamientos existentes como una exfoliación química o un drenaje y extracción. En esta última situación el dermatólogo empleará instrumentos especiales para eliminar tanto las espinillas blancas como negras de la piel del paciente.