La Asociación Española de Cáncer de Tiroides (AECAT) reclama a las autoridades sanitarias el acceso a una medicina personalizada de precisión para los pacientes con cáncer de tiroides, ya que es un gran avance en la asistencia sanitaria y favorece intervenciones médicas preventivas, diagnósticas y terapéuticas más eficaces y seguras, adaptadas a las características de los pacientes.
‘Un traje a medida para el cáncer de tiroides’ es el lema elegido para subrayar la importancia de avanzar en tratamientos ‘a medida’ para cada paciente con cáncer de tiroides con motivo del Día Nacional de esta enfermedad. La medicina personalizada no solamente evita gastos innecesarios que contribuyen a la sostenibilidad de los sistemas sanitarios, sino que ofrece al paciente una alternativa terapéutica personalizada que evita fracasos terapéuticos, efectos secundarios innecesarios y reduce el tiempo de acceso al tratamiento correcto.
«Realizar una secuenciación genética en cáncer de tiroides puede ayudar a muchos pacientes que sin ello tendrán que ir probando diferentes terapias que impactarán en su calidad de vida, además del impacto emocional del fracaso de una estrategia terapéutica en una enfermedad como el cáncer», explica la presidenta de AECAT Arantxa Sáez, paciente de cáncer de tiroides.
El principal uso clínico de los tests moleculares en las citologías indeterminadas es el diagnóstico, descartar o confirmar malignidad, y eventualmente evitar cirugías diagnósticas innecesarias, como indica el jefe del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital de Móstoles (Madrid), Garcilaso Riesco.
El doctor Riesco enumera los siguientes cánceres de tiroides como susceptibles de mejorar diagnóstico y tratamiento con estas técnicas: Nódulos tiroideos con citologías indeterminadas, ayuda a evitar cirugías diagnósticas innecesarias; tumores malignos de 1-4 cm intratiroideos de riesgo bajo, ayuda a decidir en favor de tratamientos más conservadores como la hemitiroidectomía en lugar de la tiroidectomía total más ablación con radioyodo; y cánceres metastásicos refractarios, ayudan a decidir qué tipo de tratamientos sistémicos son los más eficaces, muy especialmente en 2ª línea.