Entidades provida y de familia han manifestado su rechazo al registro de objetores de conciencia frente al aborto pues consideran que «prostituye» la profesión y «persigue» a los médicos.
«Animamos a los médicos a seguir atendiendo lo mejor posible a nacidos y no nacidos, a apostar siempre por la vida, a tratar a todo ser humano como su dignidad merece y a no admitir que nadie prostituya su profesión ni la utilice para ejercer antiderechos, porque el aborto es un antiderecho», ha subrayado, la presidenta de la Federación de Asociaciones Provida, Alicia Latorre.
Así se ha pronunciado tras conocer que el Ministerio de Igualdad incluirá en la reforma de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva y de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), un registro de profesionales objetores para garantizar el acceso al aborto en todos los casos.
Según ha indicado Latorre, no tiene «sentido» crear un registro de objetores de conciencia frente al aborto al igual que no lo tendría, según dice, «hacer una lista de bomberos que no quieren ser pirómanos».
«Los médicos se preparan para curar, para salvar vidas, para cuidar. «¿Hace falta inscribirse para decir que no van a hacer daño a nadie? ¿Tiene sentido hacer una lista de bomberos que no quieren ser pirómanos?», ha planteado.
Para Latorre, pretender que sea obligatorio inscribirse en una lista de médicos objetores «es una vuelta de tuerca más en el empeño por promocionar el aborto y presentarlo como si fuera un acto médico».
También ha mostrado su rechazo al registro el director del Foro de la Familia, Javier Rodríguez, quien ha señalado, que se trata de «nuevos mecanismos para perseguir y silenciar al disidente».
A su juicio, después de la ley de eutanasia y tras la propuesta de imponer penas de cárcel a los provida que obstaculicen el aborto, este registro «supone un paso más en la pérdida de libertad, en la persecución al que piense por sí mismo de manera diferente a la opinión impuesta por el Gobierno».
«Es un nuevo ataque a la libertad de conciencia y de opinión, señalando por parte de los poderes públicos a quienes ejerzan sus derechos fundamentales. Otro golpe ideológico y totalitario a la democracia, a la pluralidad y diversidad de la que tanto presumen en sus discursos propagandísticos», ha denunciado.
Además, ha lamentado que se «obliga a los profesionales de la salud a actuar en contra no sólo de sus creencias y valores, sino del propio código deontológico, el cual les prohíbe acabar con vidas humanas».
LAMENTAN LOS 88.269 ABORTOS DE 2020
Por otro lado, tanto la Federación de Asociaciones Provida como el Foro de la Familia han lamentado los datos publicados este martes por el Ministerio de Sanidad, según los cuales, en 2020 se produjeron 88.269 abortos, un 10,97% menos con respecto al año anterior.
«Se publican los alarmantes datos oficiales de abortos en España: a pesar de la pandemia y el confinamiento, en 2020 tuvieron lugar en España 88.269 abortos, frente a tan sólo 339.206 nacimientos», señalan desde el Foro de la Familia.
Además, el presidente del Foro de la Familia, Ignacio García-Juliá, ha destacado que el 91% de los abortos fueron «a petición de la mujer», frente a «tan sólo el 9% que fue motivado por alguno de los tres supuestos para los que se despenalizó el aborto en la primera ley sobre la materia». «Esto evidencia de nuevo que esta tragedia es principalmente de índole cultural, no sanitaria», ha indicado.
Asimismo, ha lamentado que estos datos salen a la luz coincidiendo con la propuesta de imponer penas de cárcel a los provida que obstaculicen los abortos delante de las clínicas. Por ello, el Foro de la Familia ha lanzado la campaña #AYUDARNOESDELITO, a favor de las mujeres en situación de vulnerabilidad y en contra de lo que consideran «una campaña de acoso puesta en marcha por el Gobierno».
Por su parte, la presidenta de la Federación de Asociaciones Provida, ha declarado que es una «mala noticia» que haya «un solo aborto provocado» y «más aún bajo el amparo de un falso derecho».
«Detrás de cada uno está un ser humano inocente a quien se le quita la vida por métodos horribles y el sufrimiento psíquico, moral y muchas veces físico e incluso la muerte de la madre también. Eso sí, es un negocio lucrativo para unos cuantos a costa del sufrimiento ajeno», ha criticado.
En todo caso, Latorre ha advertido de que los datos de abortos publicados por Sanidad tienen «lagunas» y «no son todos los que se han realizado». «Los abortos químicos no se contabilizan la mayoría, no todos los centros comunican sus datos, y no todas las mujeres que abortan son registradas», ha precisado.
También ha pedido tener en cuenta el contexto en que se han producido que es el de una pandemia y un confinamiento. «Aunque los centros donde se práctica el aborto han tenido un trato de favor y se les ha considerado como servicios básicos (incluso han suprimido los tres días de reflexión en algunas comunidades autónomas), en toda España han descendido todas las cifras, ha habido menos delitos, también menos nacimientos», ha apuntado.