Oltra niega que impidiera investigar al Síndic en centros de menores

La vicepresidenta y consellera de Igualdad, Mónica Oltra, ha asegurado este viernes que no impidió investigar al Síndic de Greuges en centros de menores y que solo trató de «facilitar su trabajo» al homogeneizar la información que le requirió. Además, ha apreciado «falta de rigor» en algunas frases de la resolución, al tiempo que ha lamentado que se lancen «insidias o sospechas». «Es más que bienvenido a visitar estos siete centros u otros», ha recalcado.

Así ha contestado la también portavoz de gobierno a la resolución del Síndic, Ángel Luna, en la que acuerda que visitará siete centros de menores para conocer su situación al entender que Conselleria «impide» concluir adecuadamente una investigación abierta sobre este extremo el pasado mes de enero. Estos centros ya fueron objeto de quejas anteriores en 2013 y 2015 que concluyeron con recomendaciones de actuación dirigidas al departamento de Oltra.

En marzo, el Síndic recibió como respuesta un informe de la dirección general de Infancia y Adolescencia y envió un cuestionario a cada director de estos centros –gestionados por entidades de iniciativa social– para recabar más datos. Ante la «generalizada falta de respuesta», lo volvió a pedir en mayo y a final de ese mes recibió un documento conjunto de la dirección general. Todo ello, a su juicio, demuestra que Conselleria impidió concluir la investigación, según la resolución publicada este jueves.

Oltra, en rueda de prensa tras el pleno del Consell, ha hecho hincapié en que «rotundamente no» se impidió esta investigación que «se abrió a finales de enero, en plena peor ola de la pandemia, cuando uno de cada cuatro muertos en residencias era de la Comunitat y todos los recursos luchaban contra el virus como gato panza arriba».

Según ha explicado, la petición del Síndic comportaba que cada hogar o residencia dedicara personal para desglosar el historial, la fecha de ingreso, los datos médicos, la medicación o las medidas de seguridad establecidas para cada menor. «Toda esta documentación se le facilitó y está a su disposición», ha enfatizado enseñando el tomo a los periodistas.

Tras recordar que estos centros están gestionados por entidades privadas sin ánimo de lucro, la consellera ha defendido que sus trabajadores no están acostumbrados a responder este tipo de peticiones y por eso contactaron con la dirección general para «saber cómo actuar».

«En plena tercera ola, la más letal, la dirección general les dice: no sufráis, que ahora enviamos un cuadro sistematizado para que todos tengáis lo mismo», ha subrayado, garantizando que después lo remitieron homogeneizado al Síndic para evitar «disfunciones» entre los centros. También ha mostrado el cuestionario que remitió el Síndic y el que envió la dirección general: «Todos los datos están aquí».

«EL DOBLE DE QUEJAS DE OFICIO QUE CIUDADANAS»

Por tanto, Oltra ha insistido en que su departamento actuó «igual que en todas las 58 quejas abiertas de oficio desde 2016» por el Síndic; un porcentaje que ha indicado que está «bastante por encima, prácticamente el doble, que el de las quejas ciudadanas» y de las que 31 están relacionadas con la infancia. «En todas se ha contestado con diligencia», ha ahondado, y ha asegurado que en esta petición se trató de «facilitarle la faena para que no tuviera cajas de información dispersa».

Aunque ha descartado «especular» sobre la motivación de la investigación, ha deslizado que «parece que se ha puesto de moda redactar resoluciones con frases como ‘de estos hechos parece desprenderse que alguien con autoridad suficiente dio instrucciones…’, una frase que dice el defensor del pueblo valenciano en su escrito ligándola a la remisión de información «incompleta» de los siete centros a la dirección general.

Para Oltra, estas palabras son «como la tinta del calamar», demuestran «falta de taxatividad y rigor» y lanzan «insidias y sospechas». «Si eso no se tiene claro, no se pone en la resolución; sea administrativa, judicial o sea lo que sea», ha aseverado, para afirmar que «‘parece desprenderse’ es decir que ‘alguien ha matado a alguien'».

«Ni se dificultó, ni se impidió; se facilitó», ha reiterado, advirtiendo que «no volverá a pasar» porque ya no dedicarán a «mucha gente trabajando para facilitar el trabajo del Síndic».

«TODO EN EL MISMO SACO»

Pero ha lamentado que tiene «la impresión de que la conclusión siempre es la misma: parece ser, resulta sospechoso, quién me iba a decir, cómo iba a pensar otra cosa…». Frases que «lanzan insidias y sospechas sin tener ni un solo hecho que lo corrobore», ha constatado, y ha aventurado que esto «será así mañana, pasado mañana y después de pasado mañana».

«Aquí el caso es desprenderse. Llega el PP y dice: Ximo Puig, despréndase de la vicepresidenta. Pues está todo en el mismo saco», ha ilustrado sobre la petición de dimisión de la oposición.

A preguntas de los periodistas, Oltra ha puntualizado que no le corresponde valorar las quejas del Síndic y que solo se refiere al «saco de las especulaciones» y que ella no quiere especular ni del saco «ni del hombre del saco, solo del saco de vaguedades, insidias y de nada que sea tangible». «Es muy fácil generar una sospecha, más en este mundo digital y trepidante, y algo siempre queda», ha dicho.

Tampoco ha querido hacer «juicios de valor» ni sobre el momento de interponer la queja ni sobre el número de quejas de oficio del Síndic, remarcando que ha destacado las 58 abiertas desde 2016 como «datos objetivos, públicos e incontestables». Y ha defendido la actitud y el «espíritu colaborador» de su departamento con el defensor del pueblo: «El Síndic hace su faena y yo la mía».