Los datos del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género correspondientes al segundo trimestre de este año recogen un aumento de los principales indicadores de la violencia machista (número de denuncias y de víctimas) respecto al mismo periodo de 2020, situándose en cifras previas a la pandemia del Covid-19.
En concreto, las denuncias presentadas entre abril y junio de 2021 (40.721) aumentaron un 17,8% con respecto a las 34.580 presentadas un año antes; mientras que el número de víctimas, 40.168 en el segundo trimestre del año, son un 20,4% que en el mismo periodo de 2020 (33.342).
La tasa de víctimas de la violencia de género en toda España se sitúa así en un 16,6 por cada 10.000 mujeres, es decir, «casi tres puntos por encima» que hace un año, cuando se situó en 13,8. Baleares es la CCAA con la tasa más alta (25,7 víctimas por cada 10.000 mujeres), seguida de Comunidad Valenciana (21,6) y Canarias (20,7).
El informe recuerda que las cifras registradas en los meses entre abril y junio de 2020 están entre las más afectadas por la pandemia del Covid-19 y, en este sentido, advierten de que, los correspondientes a 2021 están «muy cerca» de los datos del mismo periodo de 2019.
LAS SENTENCIAS AUMENTAN UN 177%
Entre las cifras recogidas en este documento, el Observatorio del CGPJ destaca que la mayor diferencia registrada con 2020 es el número de sentencias, que «se ha triplicado». Así, los juzgados de violencia sobre la mujer, juzgados de lo penal y audiencias provinciales dictaron en este periodo un total de 14.794 sentencias, es decir, un 177% más que el año anterior.
De ellas, fueron condenatorias un 75,2% (11.128), una cifra que supone un descenso con respecto al miso periodo de 2020, cuando se registró un 77,2% de sentencias condenatorias y se registró un «máximo histórico».
Del mismo modo, destaca que las mujeres víctimas de violencia machista que se acogieron a la dispensa de la obligación legal de declarar sumaron un total de 4.231, un 33,8% más que hace un año, en el que fueron 3.160.
Pese a este importante incremento, acorde con el experimentado por el número total de víctimas, el CGPJ advierte de que la ratio de mujeres que se acogieron a la dispensa fue muy similar al de hace un año: 10,53 víctimas por cada cien casos en el segundo trimestre de 2021 frente a las 10,31 de cada cien en el mismo periodo de 2020. De ellas, 2.601 eran españolas y 1.630 tenían otra nacionalidad.
ÓRDENES DE PROTECCIÓN
En línea con los demás indicadores de la violencia machista, las órdenes de protección también aumentaron durante el segundo trimestre del año. En total, se solicitaron 11.098 órdenes de protección, un 9,6% más que en el mismo trimestre del año pasado. De esas 11.098 órdenes de protección solicitadas, 9.504 lo fueron ante los juzgados de violencia sobre la mujer y 1.594, en los juzgados de guardia.
La suma de las órdenes de protección acordadas durante el trimestre fue de 7.969 (6.714 por los juzgados especializados y 1.255 por los juzgados de guardia), un 8,9% más que hace un año. Esa cifra representa el 71,8 % del total de solicitudes. Es decir, entre abril y junio se acordaron siete de cada diez órdenes de protección incoadas, apunta el Observatorio.
También apunta que, el 48,5% de los casos, la víctima mantenía una relación afectiva con el agresor (su cónyuge o pareja) en el momento de solicitar la orden de protección. Ese mismo porcentaje se dio en el segundo trimestre de 2020.
ORDEN ALEJAMIENTO Y PROHIBICIÓN DE COMUNICACIÓN
Los juzgados adoptaron también un total de 18.963 medidas civiles y penales de protección de las víctimas (mujeres y menores), derivadas de las órdenes de protección. Entre las penales, las más frecuentes fueron las órdenes de alejamiento (5.945) y las prohibiciones de comunicación (5.586), que representan el 67,9% y el 63,6%, respectivamente, de las medidas adoptadas por los juzgados de violencia sobre la mujer.
En ambos casos, estos porcentajes suponen un aumento con respecto a los datos de 2020: las primeras un 6,1% más y las segundas un 4%.
Además, los juzgados de violencia sobre la mujer acordaron durante el periodo analizado 40 medidas específicas de protección del menor para evitar un peligro o perjuicio. En este caso se produce un descenso, pues son 8 menos que en el mismo trimestre de 2020.
Ante estos datos, la presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, Ángeles Carmona, señala que, durante los meses más duros de la crisis sanitaria «no hubo una disminución real de la violencia machista», sino que ésta permaneció «oculta como consecuencia del confinamiento» y «de las dificultades añadidas a las que debían enfrentarse las víctimas para escapar» de su «control».
CONFIANZA EN LA JUSTICIA
«Esta circunstancia explica los motivos del importante aumento que se ha producido tanto en el número de denuncias como de mujeres víctimas entre abril y junio de este año, meses durante los que las medidas impuestas como consecuencia de la crisis sanitaria ya se habían relajado y durante los que, además, se produjo el levantamiento del estado de alarma», ha declarado.
Por este motivo, Carmona pide que «no se baje la guardia y recuerda que es fundamental seguir trabajando como hasta ahora con el objetivo último de erradicar esta lacra».
Tras insistir en la necesidad de que toda la sociedad se implique en la lucha contra la violencia de género, Carmona ha apelado al entorno más cercano a las víctimas para que den el paso y denuncien cuando tengan conocimiento de situaciones de malos tratos. «Todos los ciudadanos estamos obligados a denunciar hechos delictivos de los que tengamos conocimiento», recuerda la presidenta del Observatorio.
Del mismo modo, ha puesto el foco en los menores como «el eslabón más vulnerable de la violencia machista», recordando, en este sentido, el «terrible crimen» del pasado mes de agosto en Barcelona, cuando un hombre asesinó a su hijo de dos años de edad «con el fin último de causar el mayor dolor imaginable a su ex pareja».
Por último, ha lanzado un mensaje «de esperanza» y pide a las víctimas y a todos los ciudadanos en general que «confíen en la Justicia». Carmona afirma que «el elevado porcentaje de sentencias condenatorias dictadas por los órganos judiciales en el ámbito de la violencia machista» es «una buena muestra de que la Administración de Justicia funciona gracias al trabajo diario de todos los actores implicados y del esfuerzo colectivo dirigido a su especialización y profesionalización, tal y como está previsto en el Pacto de Estado de 2017».