El senador de Compromis, Carles Mulet, ha registrado una pregunta escrita en el Senado en la que cuestiona al Gobierno si tiene prevista la prohibición de la producción de ‘foie gras’ en toda España porque supone una «forma evidente de maltrato animal».
Mulet, miembro de la Asociación Parlamentaria en Defensa de los Derechos de los Animales (APDDA), subraya que al año en España más de 1,1 millones de patos y gansos son sometidos a la alimentación forzada, que hace crecer sus hígados hasta diez veces su tamaño normal y así, obtener el ‘foie gras’. Según recalca, esta práctica «fuerza a los animales a enfermar y supone una tortura».
Además, apunta que el territorio español junto a Bélgica, Francia, Bulgaria y Hungría son los únicos cinco países de la Unión Europea que siguen produciendo este producto. Mientras, recuerda que en países como Argentina, Austria, Dinamarca, República Checa, Finlandia, Israel, Turquía, Alemania, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Noruega, Polonia, Suecia, Suiza, Países Bajos y Reino Unido, su producción ya ha sido prohibida.
Mulet alega que las aves «son alimentadas a la fuerza entre dos y tres veces al día mediante un tubo de 30 centímetros con el que depositan en sus estómagos hasta 2 kilos de alimento al día. En este sentido, comenta que en el caso de una persona sería equivalente a que ingiriese 12 kilos de alimento en cada comida, algo que considera un «maltrato extremo incompatible con la vida», ya que muchas de estas aves «no sobreviven a las dos semanas que dura aproximadamente la alimentación forzada».