Alfonso Serrano maniobra para convertirse en secretario general del PP de Madrid

El portavoz del Partido Popular de Madrid en la Asamblea, Alfonso Serrano, se ha quedado con las ganas de más. Su labor al frente de la campaña electoral de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, el pasado abril le valió varios galones, pero de momento solo se conforma con la portavocía cuando él quiere algo más. En un principio, la líder popular le ofreció la posibilidad de hacerse con una consejería importante. Se habló de la de Sanidad o de la de Medio Ambiente, pero lo cierto es que al final la presidenta no quiso contar con él para formar parte estructural del Gobierno de la Comunidad. Ahora, Serrano ha visto un nicho en el PP de Madrid. Y se ha fijado concretamente en un puesto: el de secretario general del partido, el mismo que ocupa ahora la senadora Ana Camíns. El portavoz confía en que su presidenta se haga con el PP de Madrid en el segundo semestre de 2022 y que le nombre secretario general del partido en Madrid. Pero todo está por ver.

Serrano quiere más y ha echado el ojo al puesto de secretario general del PP de Madrid

El portavoz del PP en la Asamblea de Madrid tiene una ambición que va más allá de conformarse con ser portavoz del partido. Para él, tal y como aseguran fuentes de su entorno, no es más que un premio de consolación que le dio Ayuso por no haber sido capaz de encontrarle un buen encaje en el Gobierno de la Comunidad de Madrid después de lo que él considera una exitosa y brillante campaña electoral que llevó a la presidenta de la Comunidad de Madrid a rozar la mayoría absoluta. Serrano quiere más y ha echado el ojo al puesto de secretario general del PP de Madrid. Pero para eso su presidenta tiene que hacerse con el partido, algo para lo que queda aproximadamente un año. Entre tanto, no hay más que esperar y demostrar fidelidad y compromiso con la presidenta de la Comunidad de Madrid. Día a día, como diría Rambo…

Este cargo ahora lo ocupa Ana Camíns. Es un puesto de relevancia que permite ejercer labores de fontanería política dentro del partido. Serrano quiere ser el Teodoro García Egea de Ayuso. Quiere serlo al menos a pequeña escala, en el PP de Madrid. Dado que la presidenta de la Comunidad de Madrid no le consideró lo suficientemente preparado como para sustituir a Enrique Ruiz Escudero al frente de la Consejería de Sanidad, Serrano entiende que su futuro político pasa por los gestores de partido, y no de gobierno.

El problema es que para que el sueño de Serrano se haga realidad, Ayuso debe hacerse antes con el PP de Madrid. El congreso para determinar quién se hará con el partido en la capital se celebrará en el segundo semestre del año que viene, o al menos es lo que dicen fuentes del PP. Una vez se celebre, la idea que tiene Génova es la de que se enfrenten el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Y es aquí donde llega el problema. No está claro que Ayuso vaya a ganar el congreso su Almeida es el candidato oficialista. Pero sea como sea, Serrano tiene fe en su presidenta y considera que es el momento de empezar a maniobrar para hacerse con este puesto.

Por supuesto, todo esto entra dentro de un plano a futuro. Nadie en Génova se cree que las aspiraciones de la presidenta de la Comunidad de Madrid se queden en la capital. De hecho, la mayoría da por hecho que lo que pretende Ayuso es usar como un trampolín la presidencia del PP de Madrid para dar el salto a la formación a nivel nacional. Y Serrano, perfectamente consciente de ello, sabe que situarse como número dos de Ayuso a nivel interno en el partido le puede llevar muy lejos, hasta el punto de convertirle en el Teodoro de Ayuso. La relación entre la presidenta de la Comunidad de Madrid y su portavoz es buena, pero aún no ha llegado a buen puerto para Serrano. O al menos es lo que considera, tal y como aseguran fuentes del partido.

De momento no habrá cambios para Serrano. Al popular le espera un año tranquilo, siempre que no haya sorpresas más que reseñables, hasta que se celebre el congreso del PP. Y si no sale como esperan todos en Sol, el sueño de Serrano se verá roto, dado que no hay muchas más salidas airosas por donde el portavoz pueda explotar su potencial.

GÉNOVA, ALERTA

La presidenta de la Comunidad de Madrid tiene un equipo fiel y entregado. Casi tanto como su electorado. Pero hay algunos que se han ganado los galones a base de escenificación. El director de gabinete de la presidenta Isabel Díaz Ayuso es uno de los grandes artífices de la victoria electoral de la conocida dirigente popular. Pero, tras las elecciones autonómicas del 4 de mayo, hubo otro político que destacó considerablemente. Hablamos de Alfonso Serrano, portavoz del Partido Popular en la Asamblea, y uno de los diputados más polémicos en la Comunidad de Madrid por su manía por la escenificación. Lo ocurrido en Valencia le ha vuelto a traer a la primera línea de los comentarios en Génova por su empeño en tratar a la presidenta como una estrella del pop rock internacional. La llegada de Ayuso al congreso nacional del PP en Valencia fue obra suya. Esa llegada que aún se comenta entre bambalinas por su especial repercusión.

Lo que aseguran fuentes consultadas por este periódico es que la llegada de Ayuso a Valencia estuvo perfectamente preparada. No fue una cuestión de subir a la presidenta de la Comunidad de Madrid al coche y bajarla según llegara al Palau de les Arts. No. La llegada de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, a Valencia fue todo un montaje de Alfonso Serrano que tenía la intención de generar la mayor repercusión posible. Serrano no solo fomentó que la presidenta llegara tarde a propósito para generar aún más expectación entre los periodistas y los militantes asistentes al acto, sino que también habló con los diputados para que recibieran a la presidenta como si se tratara de Freddy Mercury.