El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha esbozado unos Presupuestos que castigan a la Comunidad de Madrid. Mientras que la inversión en Cataluña se disparará el año que viene un 11,5% y alcanzará los 2.230 millones de euros, en la capital el resultado es bien distinto, dado que el dinero invertido caerá respecto al año anterior un 7,9%, dejando el dinero destinado a la autonomía en 1.151 millones de euros. Esta diferencia (pues se invertirá el doble en Cataluña que en Madrid) no es algo que se base en estudios económicos del Gobierno, sino que se enmarca en una estrategia electoral del partido. Sánchez, tras el 4M, tiene claro que el nicho de voto del PSOE en Madrid es bajo; muy bajo. Todo esto le ha llevado a tomar dos decisiones: la primera, invertir mucho menos dinero en la comunidad que gobierna Isabel Díaz Ayuso con casi mayoría absoluta. Y la segunda, descapitalizar Madrid sacando instituciones del Gobierno a otras ciudades.
Todo se basa en los cálculos electorales de Sánchez. Fuentes del PSOE así lo aseguran. Es vox populi que el presidente del Gobierno ha asumido como deporte particular el permanecer a toda costa en el poder. Y el problema es que, en la Comunidad de Madrid, el líder del PSOE no es precisamente un ídolo de masas, sino más bien lo contrario. Los cálculos del Gobierno durante la negociación y los estudios de los Presupuestos Generales del Estado han tenido muy en cuenta los apoyos parlamentarios y el nicho de voto que pueda tener el partido en según qué regiones. El invertir el doble en Cataluña es una respuesta a la necesidad que tiene Sánchez de que ERC le apoye para sacar adelante los Presupuestos. Y el penalizar con un 7,9% menos de inversión a la Comunidad de Madrid responde a que el PSOE prefiere destinar esos recursos a otros territorios con mayor potencial de voto que Madrid, autonomía que han dado por perdida después de los resultados cosechados por el PSOE el 4M.
El PSOE no ha planteado unos Presupuestos pensando en la recuperación económica, sino en la pervivencia política. Esta afirmación que se repite en más de una ocasión entre la oposición también se escucha en algunos rincones de Ferraz. Poco se entiende que la capital, un territorio que supone el motor económico de España, reciba mucho menos dinero en inversión que otras regiones españolas. La realidad es que Sánchez ha diseñado unos Presupuestos de pervivencia, no de resiliencia ni de recuperación. Y Madrid es la gran castigada debido a que el nicho de voto de Sánchez en la Comunidad que gobierna Ayuso casi con mayoría absoluta es prácticamente nulo. Si no, que le pregunten a quienes acudieron al desfile de las Fuerzas Armadas del pasado 12 de octubre, que pitaron al presidente del Gobierno casi como si no hubiera un mañana.
La comunidad autónoma que más dinero recibirá es Andalucía, con 2.267 millones de euros. Pero no es una cifra muy superior a la que presenta Cataluña, con 2.230 millones. Pero donde contrasta es cuando se compara con Madrid. La Comunidad de Ayuso es la que más dinero aporta al país, pero ahora ha sido penalizada un 7,9% mientras que Cataluña recibirá un 11,5% más que el año anterior. El País Vasco, por su parte, recibirá nada menos que 489 millones de euros.
el número de potenciales votantes en cada autonomía han guiado la inversión
Desde el PSOE hay algunos moderados que tienen claro que el número de potenciales votantes en cada autonomía han guiado la inversión. Por supuesto, dentro de unos criterios relativamente lógicos. Andalucía, Cataluña y la Comunidad Valenciana son las tres autonomías que más dinero recibirán. Y las regiones que más verán incrementada dicha inversión serán Galicia (29,1%), Castilla-La Mancha (25,8%), y Castilla y León (17,7%). Todo esto tiene relación con los votos potenciales, no con los gobiernos que rigen las autonomías en cuestión. Y todo esto ha penalizado a Madrid por encima de otras autonomías, aunque con cierta discreción. El 4M marcó al presidente del Gobierno porque vio cómo incluso hubo sorpasso de Más Madrid al PSOE. No solo Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, arrasó en las elecciones autonómicas del 4 de mayo de 2021, sino que hasta la izquierda parece haber dado la espalda a un PSOE en declive en la capital. Esto ha motivado al presidente a reducir la inversión en la región casi un 8% además de tomar otras medidas para «castigar» a Madrid por no saber votar, como es el caso de descapitalizar la ciudad.
Madrid, con un 14% de la población española, y que genera más de un 19% del PIB, recibe en los PGE de 2022 tan solo el 8,9% del total de las inversiones territorializadas, cifra incluso inferior al 10,3% de 2021. Por su parte, las inversiones en Cataluña crecen suponen el 17,4% del total. En la Comunidad Valenciana, las inversiones suponen el 9,3% del total. Este resumen lo dice todo.
CASTIGADA SIN CAPITAL
Sánchez es un killer. Esta afirmación no la niegan ni en Ferraz. Cuando algo le molesta, dispara sin piedad. Y cuando se trata de alguien, no tiene miramientos en cesar a la mitad de su propio Gobierno. Esto lo vimos en verano y ahora parece que hay nuevos escenarios en los que disfrutar de los impulsos del presidente del Ejecutivo.
Sánchez ha echado el ojo a Madrid porque no saben votar. Este es el resumen que dan desde la oposición. Pero el castigo va más allá de dejarle sin paga al principal motor económico del país. Ahora quiere sacar de Madrid algunas de las instituciones que las recoge por el hecho de ser la capital. Él lo llama «descapitalizar» Madrid, pero en el fondo hay quien piensa que se trata de otro castigo más a una Comunidad que ha ignorado el mensaje socialista y que abuchea al presidente allá por donde pase.
