Gobierno Vasco advierte que «reconocer el dolor y restaurar la memoria de todas las víctimas» son tareas pendientes

El portavoz del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria, ha valorado que la declaración de EH Bildu y Sortu de este pasado lunes «identifica a las víctimas de ETA como destinatarios de su mensaje» y adquiere un compromiso para «mitigar su dolor». En este sentido, ha advertido de que «las tareas para los próximos años que pasan por el reconocimiento del dolor y la restauración de la memoria y la dignidad de todas las víctimas».

En una entrevista concedida a Radio Euskadi, el portavoz del Ejecutivo vasco ha considerado que la declaración hecha pública en Aiete por la izquierda abertzale es un mensaje que «adquiere su importancia» en el contexto de la celebración de los diez años sin violencia de ETA que se cumplen esta semana.

«Es un elemento más de un proceso que comenzó hace diez años y que ha permitido a muchas generaciones vivir por primera vez en paz y que plantea una serie de tareas y deberes para los próximos tiempos», ha apuntado.

Zupiria ha destacado que, en esta declaración, hay una referencia a «aquellos que apostaron de manera decidida, valiente y arriesgada por las vías exclusivamente pacíficas porque han cosechado un éxito rotundo e incontestable» que supone se dirige a «los miembros de su movimiento que se resistieron a abandonar la violencia hace diez años».

No obstante, por su parte, ve «reflejado» en ese párrafo a «la mayoría de la sociedad vasca que hace diez años apostó inequívocamente y exclusivamente por las vías democráticas y políticas para labrar su futuro».

Según ha añadido, «eso que la mayoría de la sociedad defendió cuando se inició la transición democrática en 1977, esa actitud que la mayoría silenciosa de la sociedad vasca ha mantenido durante 40 años construyendo nación, instituciones, sociedad, es el ejemplo que ellos durante 40 años no siguieron y que seguramente la mayoría de la sociedad vasca está esperando» a que lo digan.

Zupiria ve «aspectos positivos» en la declaración de este lunes y, en concreto, ha opinado que su importancia radica en que «identifica a las víctimas de ETA como destinatarios de su mensaje» y adquiere un compromiso para «mitigar su dolor y reconocer su dolor y su memoria».

No obstante, ha añadido que también «eso indica de alguna manera cuáles son los deberes para los próximos meses». «Las tareas para los próximos años pasan por el reconocimiento del dolor y la restauración de la memoria y la dignidad de todas las víctimas», ha insistido.