Interior advierte a Escrivá: facilitar los papeles a los MENAS tendrá un «efecto llamada»

El PSOE ha conseguido sacar adelante un nuevo decreto a través del cual allanan el camino de los menores extranjeros no acompañados (menas) para hacerse con los papeles necesarios para regularizar su situación en España. El Gobierno ha aplicado a través del Consejo de Ministros una modificación del reglamento de Extranjería que facilitará dar los papeles a todos los menas. Es decir, que todos los que asaltaron Ceuta en mayo ahora tendrán mucho más fácil hacerse con los papeles. Esta norma nueva ha sido muy criticada por los partidos en la oposición. Y hay quien desliza que esta nueva norma busca nada menos que «buscar votos» a golpe de dar la nacionalidad a los menores no acompañados. Sea como sea, de momento simplemente se busca facilitar el acceso al mercado laboral de estos menores inmigrantes, no darle ni mucho menos la nacionalidad. Aún así, hay partidos como Vox que ya han puesto el grito en el cielo. 

«En plena crisis de inseguridad ciudadana, el PSOE y Podemos regularizan a 15.000 MENAS. Son co-responsables de cada delito que cometen», ha comentado el portavoz de Vox en el Congreso de los Diputados, Iván Espinosa de los Monteros. Estas palabras también las comparten desde el Partido Popular porque entienden que estos decretos del Gobierno no son más que un efecto llamada a las mafias que juegan con la vida de estos inmigrantes, especialmente en el norte de África. Desde el Gobierno apelan a la humanidad y a la solidaridad para aplicar esta nueva norma que agiliza la entrega de papeles a estos jóvenes migrantes. Pero Vox y PP no comparten que esta sea la solución. Por no hablar de que más de uno ha lanzado al aire que se buscan votos a golpe de dar los papeles a los menas.

 La medida sobre migraciones pertenece al ministro José Luis Escrivá, y la ha tomado sin el consentimiento del titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska. Es un proyecto que no cuenta con el beneplácito de todos los miembros del Gobierno, pero que Escrivá ha conseguido sacar adelante por contar con el apoyo de Sánchez. Para Marlaska, allanar el camino a los menas y a su acceso al mercado laboral es algo que beneficia a las mafias y que se puede convertir en un problema mayor a largo plazo. Si las mafias tienen éxito a la hora de colar a los inmigrantes en España, elevarán la presión. O al menos es lo que creen los expertos de Interior. Aún así, el Gobierno ha silenciado a Marlaska y ha vendido la medida como un éxito más del Ejecutivo.

La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha asegurado que el Real Decreto que modifica el Reglamento de Extranjería tan solo busca «simplificar los procedimientos administrativos, reducir los trámites evitando que lleguen a la mayoría de edad sin documentación». Vamos, que quieren «respetar y conservar la inversión pública que se ha hecho en su formación, en su integración y en el acogimiento por parte de las comunidades autónomas» cuando eran menores «facilitar la incoporación de estas personas en el mercado de trabajo, simplificando toda la carga administrativa».

Esta medida parece no haber tenido una repercusión notable, pero no ha pasado desapercibida entre la oposición. Se reducen plazos para dar la documentación pertinente a los menores inmigrantes, algo que ha sido interpretado como un problema por parte especialmente de Vox, pero también de personas como Marlaska. Quienes han visto lo que se mueve en las fronteras de Ceuta, Melilla o del sur de España saben que las mafias se nutren de esto. Agilizar y facilitar solo hará que las mafias se llenen más los bolsillos. Pero Vox entiende que además el integrar en la sociedad a los menas puede acarrear problemas sociales mayores, como incrementar la delincuencia.

MARLASKA ROMPE CON PODEMOS

El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha dado cumplimiento por primera vez al acuerdo entre el Reino de España y Marruecos sobre la prevención de la inmigración ilegal de los MENAS, menores no acompañados. El país vecino dejó entrar a sus jóvenes por la frontera en respuesta a la falta de comunicación de la entrada en España del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali.

Pese a la caótica situación en la frontera, con los agentes de la Guardia Civil y la Policía Nacional desbordados, el Gobierno no actuó con contundencia y dejó pasar los días hasta que ordenó el despliegue del Ejército en la frontera. Unas imágenes bochornosas y que ha dejado, una vez más, la imagen de España por los suelos. Ghali fue sacado de España rumbo a Argelia a inicios de junio, pero la crisis diplomática con Marruecos ha persistido.

De hecho, el Ministerio de Asuntos Exteriores, con José Luis Albares al frente, ha cortado el grifo a Marruecos y ha denegado la entrega de un nuevo regalo de 1,2 millones de euros en 90 quads. El ministro del ramo ha puesto así punto y final a la etapa derrochadora de su antecesora.