El jefe de marketing de Metro, Miguel Oliver, se quedó a gusto criticando las condiciones laborales de los empleados del suburbano. Lo hizo cuando no se esperaba que trabajaría en la empresa pública, mientras era redactor jefe en el diario ABC. No solo atacó las buenas condiciones laborales de los trabajadores de Metro de Madrid en un artículo llamado «El chollo de trabajar en el Metro», sino que también lanzó titulares que deslizaban cierto desdén hacia los empleados que se echaron a las calles en el año 2010 para impedir que se recortaran sus salarios; o como decía Miguel Oliver, esos protestantes que se negaban a «apretarse el cinturón». Ahora, afortunadamente, la lucha de estos trabajadores de Metro de Madrid ha mantenido un positivo convenio del que disfruta el propio Oliver en calidad de directivo de Metro. De hecho, Oliver no se ha apretado precisamente el cinturón dado que cobra alrededor de 100.000 euros al año. Dinero que pagan entre todos los madrileños.
Son casi 93.855 euros públicos que cobra al año. El jefe de marketing de Metro tiene un puesto más que bien remunerado. Podría pasar por un directivo de banca o por el CEO de una empresa solvente, pero lo cierto es que el único recorrido de Miguel Oliver ha sido el de saltar de redactor jefe del diario ABC a la Comunidad de Madrid. Eso sí, cuando los trabajadores de metro convocaron una huelga en 2010, Oliver deslizó en el titular cierto desdén hacia estos empleados. Por supuesto, entonces no estaba en juego su puesto de trabajo. Por esas fechas, Oliver era redactor en el diario ABC y había echado el ojo a esos trabajadores de Metro de Madrid que se empeñaban en vivir bien y con buenas condiciones a pesar de la crisis. El titular de la noticia firmada por Miguel Oliver en junio de 2010 era «Huelga salvaje en Metro de Madrid para evitar apretarse el cinturón». Y el subtítulo dejaba claro la razón por la que miles de trabajadores se habían quedado sin llegar a tiempo a sus puestos debido a la huelga: «Los sindicatos se niegan a una rebaja salarial del 2,15 por ciento». Para que el lector se haga una idea, un 2,15% del sueldo de Oliver al año representa aproximadamente unos 2.000 euros al año. Un par de salarios mínimos, tal y como le gusta comparar a él.
Esto se suma a otro artículo en el que Oliver se quejaba del «chollo» que suponía trabajar en Metro
Esto se suma a otro artículo en el que Oliver se quejaba del «chollo» que suponía trabajar en Metro. Lo que cuentan las fuentes es que este colectivo era para el redactor jefe de ABC algo caprichoso. Vivían bien, muy bien, y tenían un convenio y unas condiciones laborales extremadamente buenas a ojos de Oliver. Tanto, que no entendía que se quejaran. La cantidad de artículos de Oliver es interesante cuando se habla de Metro de Madrid. Algunos están borrados y han desaparecido. Pero otros siguen vigentes a la espera de ser descubiertos.
Los sindicatos ya han deslizado su indignación respecto a los artículos firmados por Oliver. No entienden que nadie critique las condiciones laborales de los empleados ni sobretodo que luchen por mantenerlas, que no mejorarlas. Pero menos entienden que quien está en la dirección de marketing por obra y gracia del exconsejero de Transportes Ángel Garrido y quien ha sobrevivido al cese de todos los altos cargos de Ciudadanos haya criticado tanto sus condiciones laborales cuando es el primero que se aferra al sillón para no marcharse de Metro de Madrid. Cualquiera renuncia a más de 90.000 euros al año.
Oliver guarda silencio, pero en la Consejería de Transportes se respira un ambiente algo tenso dado que nadie entiende por qué el jefe de marketing de Metro de Madrid sigue en su puesto de trabajo. No solo por las palabras que dijo sobre los trabajadores durante su paso por ABC, sino porque Oliver dio el salto a Ciudadanos de la mano del anterior consejero de Transportes y es el único directivo intermedio de la formación naranja que sigue ahí, en un despacho repleto de diarios deportivos y con un salario que supera al del presidente del Gobierno de España.
EL CHOLLO DEL METRO
El director de marketing de Metro de Madrid, Miguel Oliver, nunca se pensó que acabaría leyendo el Marca como un trabajador más de esta entidad pública de la Comunidad. En este caso, no es algo que aseguren fuentes de Sol, sino que es el propio pasado de Oliver el que habla por sí mismo. Cuando era un redactor más del diario ABC allá por 2010, Miguel Oliver no soportaba las buenas condiciones laborales de los trabajadores de Metro de Madrid. De hecho, le parecían absolutamente beneficiosas comparadas con la del resto de trabajadores. Criticaba desde los días de vacaciones que tenían hasta la seguridad laboral de la que disfrutaban. No se guardó nada porque, para entonces, ¿quién le iba a decir que acabaría siendo uno de esos trabajadores que viven tan bien a costa del erario público? Entonces le parecía algo escandaloso que «el 65% de la plantilla alcanzan los 33.000 euros (3,7 el SMI)». Ahora Oliver se embolsa gracias al puesto en el que le colocó el exconsejero de Transportes Ángel Garrido algo similar a lo que cobra el presidente del Gobierno de España. Y goza de esas condiciones laborales que tanto criticaba cuando era un simple redactor.
